A Alma Rosa, de 49 años de edad, médicos del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) le ayudaron a recuperar su autoestima y la sonrisa, luego de extirparle un tumor que le deformaba el rostro.
La monclovense estaba deprimida, evitaba salir a la calle y cuando lo hacía, se cubría la cara. Antes de acudir al Seguro Social, la mujer que tiene tres hijos y cinco nietos, buscó ayuda en distintos lugares pero nadie quiso correr riesgos.
Tras realizarle estudios, los médicos del Hospital General de Zona No.7 en Coahuila, le diagnosticaron un mioepitelioma, que es un quiste que crece y aunque no es maligno, en su caso afectaba su cara.
De acuerdo con Wendy Paola Delgado Galván, especialista en Cirugía Maxilofacial, se trató de una intervención delicada en virtud de que había peligro de alguna lesión en el nervio facial, lo que dejaría a la paciente con una parálisis el resto de su vida.
La doctora explicó que este procedimiento, el tipo de abordaje, la incisión y el conocimiento aplicado fueron elementos claves para lograr extirparlo y asegurar la salud de la Alma Rosa sin afectación alguna.
Ahora la coahuilense lleva una vida normal, disfruta de su familia y sale a la calle a sonreír y mostrar su rostro.
