Ante tendencia de desperdicios 'podría haber más plásticos que peces para 2050' en el mar: UNAM

El “gran parche de basura del Pacífico” alcanza 79 mil toneladas de plásticos flotando en un área de 1.6 millones de kilómetros cuadrados.

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* Audio: Ana Carolina Ruiz Fernández, investigadora de la Unidad Mazatlán del Instituto de Ciencias del Mar y Limnología (ICMyL) de la UNAM.
 
De no parar el depósito de basura en las playas, para 2050 habrá más toneladas de plásticos que peces en el océano, alertó Ana Carolina Ruiz Fernández, investigadora de la Unidad Mazatlán del Instituto de Ciencias del Mar y Limnología (ICMyL) de la UNAM.
 
El llamado “gran parche de basura del Pacífico” alcanza 79 mil toneladas de plásticos flotando en un área de 1.6 millones de kilómetros cuadrados, 27 veces la extensión de Sinaloa, especificó.
 
 
Los plásticos desechables, como botellas para agua potable, contenedores de alimentos y otros empaques, proliferan a la vista de todos en playas y mares de México y otros países, especialmente después de temporadas vacacionales. Su mala gestión provoca que cada año vayan al océano entre cinco y 13 millones de toneladas.
 
“Las fracciones nano (partículas menores a 100 micras) ya están insertándose a nivel intracelular en los peces, así que esa basura que arrojamos al mar nos la vamos a comer de regreso”, remarcó.
 
En la bahía de Mazatlán y en otros cuerpos de agua de esa ciudad sinaloense es evidente el efecto de la contaminación generada por malas prácticas de algunos sectores productivos y de la sociedad en general. 
 
El problema se refleja en el desaseo del entorno y en el deterioro de la calidad del agua, que afecta a plantas y animales que habitan los ecosistemas acuáticos contaminados y que pueden ser dañinos para la salud humana.
 
Para revertir esta tendencia, monitorear algunos mares de América Latina y el Caribe y realizar un diagnóstico de los daños, se lleva a cabo un proyecto internacional auspiciado por el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), que ha unido los esfuerzos de 16 países de la región para implementar un proyecto de cooperación técnica regional.
 
En el caso de México, Mazatlán es el sitio seleccionado, así que la bahía de ese puerto y el estero de Urías serán las zonas de estudio. 
 
“Este esfuerzo internacional está promovido por el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente, pero el OIEA tiene el mandato de la ONU del uso pacífico de la energía nuclear. Muchas cosas en el medio marino se miden a través de la radioactividad, por eso este proyecto aplica varias metodologías y procesos basados en esa energía”, abundó.
 
El OIEA posee el Laboratorio de Ambiente Marino, una instalación especializada ubicada en Mónaco, punta de lanza en la investigación marina utilizando radioactividad. Estudian contaminación por metales pesados e hidrocarburos con técnicas como la espectrometría de masas y la fluorescencia de rayos X, que dan gran precisión y rigor científico.