Un nuevo método para dejar de fumar fue encontrado por investigadores de la Universidad de Ontario Occidental, Canadá, quienes realizaron un experimento publicado en la revista Journal of Consumer Affairs.
Los especialistas decidieron ilustrar las cajetillas de cigarros con personas realizando dos expresiones faciales distintas: neutral y de disgusto.
Fueron 156 fumadores a los que sometieron a las cajetillas ilustradas; cuando veían la que tenía el rostro con expresión de disgusto, mostraban interés en dejar de fumar al sentirse avergonzados.
Aunque este método puede ser efectivo, también es considerado no del todo ético, ya que los fumadores que no puedan dejar el cigarro podrían sentirse aún más estresados.