La diversidad de suelos en la CDMX también juega un papel importante en la fruticultura urbana. Desde suelos arcillosos hasta arenosos, con diferentes niveles de pH y fertilidad, la ciudad ofrece opciones para poder cultivar una gran variedad de árboles o plantas frutales.
Incluso si tu espacio es limitado, puedes aprovechar macetas o jardineras para cultivar algunos frutales en tu balcón o terraza. Especies como cítricos, manzanos enanos, higueras, perales en espaldera y fresas se adaptan perfectamente a estos espacios reducidos.
El clima y espacio necesario:
El clima de la Ciudad de México, con temperaturas templadas y lluvias durante el verano, es ideal para el cultivo de una gran variedad de plantas frutales. Incluso si tienes un espacio limitado, puedes aprovechar ese espacio para cultivar algunos frutales en tu balcón o terraza.
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Opciones para tu jardín o huerto:
Manzanos: Hay variedades enanas que se adaptan a espacios pequeños. Producen frutos dulces y jugosos en 3 a 4 años.
Perales: Requieren sol directo y buen drenaje. Ofrecen deliciosas peras en 4 a 5 años.
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Ciruelos: Crecen bien en climas templados. Sus frutos maduros son dulces y de textura suave, y se cosechan en 3 a 5 años.
Higuera: Un árbol resistente que requiere poco cuidado. Produce higos dulces y carnosos en 2 a 3 años.
Naranjos: Brindan frutos aromáticos y jugosos en 4 a 5 años. Elige variedades enanas para espacios reducidos.
Limoneros: Un clásico que no puede faltar. Sus frutos ácidos son muy versátiles en la cocina. Se cosechan en 2 a 3 años.
Fresas: Ideales para macetas o jardineras. Ofrecen frutos dulces y refrescantes en pocos meses.
Arándanos: Requiere suelo ácido y sombra parcial. Sus frutos son antioxidantes y deliciosos. Se cosechan en 2 a 3 años.
Con paciencia y dedicación, podrás disfrutar de tener tu propio cultivo y también la satisfacción de cosechar tus propios frutos frescos y orgánicos en la CDMX.