‘El Principito’, la obra de Antoine de Saint-Exupery, es una de las más reconocidas a nivel mundial dentro de su género, y es que a pesar de que la novela fue tomada como libro infantil, varios aspectos pueden ser rescatados como una lección valiosa para la vida adulta. Te damos 3 razones del porqué debes leer esta obra.
Antes de seguir con la novela, debes saber que un día como hoy, pero de 1944, el escritor Saint-Exupery realizó un vuelo, del cual ya nunca regresó puesto que se declaró desaparecido en el Mediterráneo. Sus restos nunca fueron hallados y tenía 44 años al momento de la noticia.
La muerte de Antoine de Saint-Exupéry sigue siendo un enigma hasta el día de hoy. Aunque su avión fue encontrado en 2000, no se han descubierto pruebas concluyentes sobre las circunstancias de su desaparición.
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3 razones para leer “El Principito” de Antoine de Saint-Exupéry
Aprende de tus errores
Reconocer la relevancia de los errores como oportunidades de aprendizaje y estar dispuesto a aventurarse por senderos desconocidos es crucial. Permanecer con el miedo y estancado en una única dirección no conduce al avance; más bien, limita nuestras capacidades y obstaculiza nuestro crecimiento personal y profesional.
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Estar en el aquí y en el ahora
El cambio constante en la sociedad ha tenido un impacto negativo en la comunicación y las relaciones humanas. En la actualidad, con la tecnología predominante, la comunicación cara a cara ha sido reemplazada en gran medida por el envío de mensajes de texto, y “El Principito” lo que resalta es la importancia de mantener la conexión con las personas que nos rodean.
Toda acción trae una consecuencia
Cada elección y acción que emprendemos tiene repercusiones, aunque estas no siempre sean inmediatas. Es importante recordar que en casi todos los aspectos de nuestra vida no trabajamos solos, sino funcionamos como parte de un todo. Por lo tanto, al tomar decisiones que pueden afectar al otro, es esencial reflexionar y considerar otras opiniones antes de actuar.
El legado de Saint-Exupéry como escritor y aviador perdura en la memoria colectiva. Sus obras literarias, especialmente "El Principito", se encuentran inspirando a generaciones de lectores en todo el mundo. Además de su legado literario, también es recordado como un valiente piloto y aventurero del cielo que sufrió y murió persiguiendo su pasión por la aviación.