Las siguientes compañías, que alguna vez fueron pilares en diversos sectores de la economía mexicana, enfrentaron el desafío de adaptarse a un entorno empresarial en constante evolución. La pérdida de estas empresas no solo resonó en el ámbito económico, sino que también llevó consigo una carga histórica que contribuyó a la identidad empresarial del país, como la empresa ‘deTodo’ que, a pesar su popularidad, quebró. Esta fue la razón.
Hoy, descubriremos las razones detrás de la desaparición de estas empresas antiguas, destacando los factores económicos, tecnológicos y sociales que han precipitado su declive.
¿Por qué cerró la tienda “deTodo”?
Aunque nunca tuvieron muchas tiendas, "deTodo" era un favorito de muchas personas porque, literalmente, tenían, como decían en su jingle y anuncios, "deTodo".
Con un logotipo diseñado por Lance Wymany una capacidad para mantenerse en el mercado aún ante el crecimiento y desaparición de otras muchas cadenas de supermercados, la suerte de "deTodo" fue sellada cuando Walmart los compró y los transformó en Walmarts comunes y corrientes.
Otras tiendas que desaparecieron
Banco Serfin
Banco Serfin fue fundado en 1864 con el nombre de Banco de Londres y México. El banco fue uno de los primeros en implementar billetes, pero la producción constante de estos provocó una fuerte devaluación en el país. Con los años se fusionaría con otros bancos y finalmente en 2005 se fusionó con el Banco Santander.
París-Londres
"París-Londres, la gran boutique" se anunciaba esta tienda en las décadas de 1970 y 1980. Al igual que los aún existentes almacenes el Palacio de Hierro y Liverpool, el negocio de "París-Londres" se dedicaba a traer la moda más reciente de, sí, París y Londres, y venderlas al público mexicano que esperaba las últimas tendencias. Sin embargo la competencia fue demasiado para la cadena de almacenes y para principios de la década de 1990.
Burger Boy
El más famoso de los restaurantes de hamburguesas en México antes de la llegada de McDonalds en la década de 1980 al país, Burger Boy era famoso por la calidad de sus hamburguesas, que fluctuaba entre los fanáticos irredentos y los que esparcían los mitos urbanos que aseguraban que estaban hechas de "carne de rata".
Al igual que la tienda "deTodo", y muchos de los primeros comercios en el mercado, Burger Boy no soportó la entrada de nueva competencia al país y quebró como la mayoría de las hamburgueserías nacionales.