El cine es el séptimo arte que nos ayuda a conectar con historias que parecen lejanas, donde existen más de un género en el que nos podemos sentir proyectados.
Por otra parte, el cine mexicano ha evolucionado desde sus inicios.
Adecuando sus narrativas a las problemáticas del país.
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Todo comenzó en Chapultepec
La primera función de cine se realizó en el Castillo de Chapultepec, doce meses después de su aparición en Paris.
Bernard y Gabriel Vayre fueron enviados de los hermanos Lumi\u00e8re para ‘dar a conocer’ su invento, la proyección reflejaba a los trabajadores de una fabrica en una manta blanca.
De acuerdo a Aurelio Reyes, investigador del Instituto de Investigaciones Estéticas, los hermanos Vayre no solo tenían como misión exhibir los archivos de Lumi\u00e8re sino también dedicaron la mayor parte de su tiempo en firmar y grabar diferentes acontecimientos y hechos importantes de aquellos días.
En total se grabaron cerca de 35 películas de las cuales se conserva el archivo de casi una docena.
Dentro de los trabajos realizados en el país destacan , El presidente de la república entrando a pie al Castillo de Chapultepec, Lanzamiento de un caballo salvaje, El presidente de la república con sus ministros del 16 de septiembre en el Castillo de Chapultepec, Alumnos de Chapultepec con la esgrima del fusil, entre otros.
Esto revolucionó las artes mexicanas y fueron los primeros indicios de los que hoy en día conocemos.
El cine de oro
Esta edad se extendió desde 1936 hasta 1959 y fue durante dicho periodo que el cine paso de ser nacional a ser reconocido a nivel internacional.
Esto no fue casualidad, ya que las producciones de Estados Unidos y Europa estaban centrados en los problemas bélicos de la Segunda Guerra Mundial, México se preparaba para salir al mundo cinematográfico.
Los temas que la industria mexicana exploró eran perfectamente adaptados a la comunidad hispana ya que captaban la atención de la audiencia debido a los géneros que relataban.
Estos iban desde el romance y la comedia hasta los musicales.
Esto propicio que México tuviera un gran camino hacia el éxito y reconocimiento.
Debido a esto, México no tenía competencia debido a que el país era quien le surtía películas a todos los cines de Latinoamérica.
Los actores fueron uno de los factores que ayudaron exponencialmente al cine.
Y es que debido a las características y las representaciones que se les dio, hicieron que el público se siéntela más cercano a ellos debido a un sentimiento de nacionalismo.
Se crearon diferentes arquetipos para los personajes de la época que curiosamente eran muy parecidos a los ciudadanos de aquellos años: La mujer de mundo y elegante interpretada por María Felix, , el héroe del barrio como Pedro Infante, el padre con autoridad como Fernando Soler, el gracioso y extrovertido como Cantinflas y sin dejar de lado la diversión que propiciaban los pachucos como Tintan y Resortes
La nueva era
Con toda la escuela y el peso que dejaron en la gran pantalla, surgieron grandes directores contemporáneos que estudiaron dentro y fuera del país.
Esto ha puesto a México como uno de los ganadores de los Premios de la Academia.
No solo hay directores como Guillermo del Toro, Alejandro González Iñarritú y Alfonso Cuarón, cada uno con sus respectivos galardones, han cío acompañados por técnicos, fotógrafos e integrantes de la producción que también han ganado un Óscar.
Un ejemplo de ello es Emmanuel ‘El Chivo’ Lubezki o Emile Kuri, quien han ganado en dos ocaciones la estatuilla en fotografía y vestuario, respectivamente.
Sin duda alguna, México tiene el talento, las escuelas, las mentes y la cultura para seguir destacando en la pantalla nacional e internacional.
¡Nos vemos en el cine!