La preocupación por la contaminación y el medio ambiente podría hacer que los drones sustituyan a los fuegos artificiales como “alternativa verde”, tal como se hizo en la ceremonia de apertura de los Juegos de Tokio.
Los gobiernos de China e India ya han intentado limitar el número de fuegos artificiales que se lanzan durante las celebraciones del Año Nuevo Lunar y el Diwali para minimizar la peligrosa contaminación atmosférica.
Incluso Sidney, en Australia, famosa por sus fuegos artificiales de Año Nuevo, está considerando sustituir la pirotecnia por drones para reducir el riesgo de incendios forestales, según informaron los medios de comunicación australianos el año pasado.
¿El fin de los fuegos artificiales?
Los drones representan una opción viable y una alternativa verde, ya que son reutilizables y no producen contaminación acústica ni química. Por lo tanto, tampoco causan daños en la fauna de la zona, ni riesgo de incendios.
Además, los shows son personalizables porque permiten crear espectáculos con potentes luces LED que pueden asombrar al público con más de cuatro millones de combinaciones de colores.
Los drones se han convertido en una opción para sustituir a los fuegos artificiales, ya que producen una mayor variedad de efectos visuales y oportunidades casi ilimitadas para la narración artística en el cielo.