Eran 300 los perros rescatistas que se esforzaron para que pudieran salir 3 mil personas de los edificios durante la caída de las Torres Gemelas.
De entre los 300 canes, Roselle es una perrita labrador que salvó a su dueño, quien era ciego, y también a 30 personas más, que relatan que el animalito los guiaba entre fuego, humo y escombros a través de 80 pisos.
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Michael Higson, dueño de la labrador, laboraba como gerente de ventas de la compañía Fortune 500 Quantum, comentó a Sunday Express que Roselle se encontraba debajo del escritorio cuando comenta que se escuchó un "buuum y el edificio comenzó a temblar e inclinarse lentamente".
Michael relata que durante ese evento, sus compañeros se comenzaron a despedir entre ellos, ya que pensaron que ahí se iban a morir. Sin embargo, como la perrita, que sabía que se debe evitar los ascensores y no entrar en pánico durante catástrofes, comenzó a guiar a su dueño a un lugar seguro y demás personas comenzaron a seguirles.
Después de una hora, la perrita logró que todos llegaran al vestíbulo, ya ahí corrieron hacia la salida e inmediatamente fue que el edificio colapsó.
Tiempo después, Roselle dejó de ser perro guía y Michael aprovechó para adoptarla y vivir con ella hasta el día que falleció a causa de una úlcera de estómago.
