La tala ilegal de árboles amenaza uno de los mayores santuarios de orangutanes en la isla de Borneo, donde una veterinaria española lucha para preservar un hábitat en el que el gobierno indonesio hizo una concesión de tierras a una compañía maderera.
Entre 950 y mil 200 orangutanes, según cifras oficiales, viven en Sungai Putri, una zona de cerca de 57.000 hectáreas del distrito Ketapang, en la provincia de Borneo Occidental, dominada por una turbera y de una gran biodiversidad.
Ante dicho escenario, fue difundido el video que muestra un orangután mientras caminaba por encima del tronco de un árbol derribado y atacar una excavadora que talaba los árboles.
Después de enfrentarse a la enorme máquina cayó al suelo y se fue en busca de un refugio.
Aunque las imágenes fueron grabadas en 2013, esta semana fueron difundidas por International Animal Rescue, una organización mundial en defensa de los animales. En sus redes sociales la entidad escribía, “Este orangután desesperado busca frenéticamente refugio ante el poder destructivo de la excavadora, una máquina que ya ha diezmado todo lo que le rodea”.
En los últimos 10 años más de 50 orangutanes han sido rescatados en el bosque de Sungai Putri y sus alrededores por la organización que lidera la doctora, que llegó al archipiélago en 2003 como voluntaria en varios centros de rehabilitación para animales salvajes.
De acuerdo con Karmele Llano Sánchez, veterinaria oriunda de Bilbao que dirige la organización conservacionista International Animal Rescue (IAR), “es la tercera población más grande de la provincia y una de las mayores de Borneo y del mundo”.
En esa zona, el gobierno indonesio aprobó en 2015 una concesión de 40.000 hectáreas a la empresa indonesia PT Mohairson Pawan Khatulistiwa (MPK) para llevar a cabo una plantación de madera industrial en la mitad del terreno y efectuar tala selectiva de bosque en la otra mitad.
Sin embargo, la ministra de Medioambiente y Bosques, Siti Nurbaya Bakar, congeló el proyecto en marzo del año pasado después de que varios informes revelaran la construcción de canales para drenar la turbera que amenazaban el ecosistema del bosque y la población de orangutanes.
A pesar de la decisión del Gobierno, una investigación de Greenpeace publicada el martes reveló operaciones de tala ilegal dentro de la concesión de PT Mohairson Pawan Khatulistiwa en al menos 6 campamentos que operan de noche e “incluso cerca de nidos de orangutanes”.
Con información de EFE y La Vanguardia