Con el fin de predicar la palabra de Dios, un pastor cristiano puertorriqueño de nombre Javier Donate, solicitó los servicios de unas trabajadoras sexuales en un burdel de Bogotá, Colombia.
Acompañado de otro religioso, Donate pagó 10 dólares por cada chica; sin embargo, cuando llegaron al cuarto tuvieron una experiencia sin precedentes.
“En lugar de tener sexo con ellas, les hablamos del amor de Jesucristo“, relataron junto al video de los encuentros.
Una de las jóvenes pensaba que tendría un encuentro íntimo con los dos “clientes”; sin embargo, se sorprendió cuando le obsequiaron una flor y una Biblia en la que anexaron una hoja con los datos de un centro de atención para mujeres en situación difícil.
La joven de 22 años, soltó el llanto y confesó que sufría maltratos de los hombres que la contrataban.
La reacción de otra chica fue muy diferente, ya que soltó una risa incrédula ante la propuesta del pastor. Ella relató que era venezolana y profesaba la fe cristiana, pero ahora se encontraba en ese lugar.
Con información de RT