Una casa de apuestas, ha subastado la botella más cara de whisky, el pasado 3 de Octubre en Edimburgo. La botella se vendió en una casa Bonhams, rompiendo récord con 1,1 millones de dólares.
La botella Macallen, tuvo un proceso de destilación en 1926 y permaneció en el barril hasta 1986. De esta bebida, sólo se elaboraron 24 botellas y su precio tan caro, se debe no solo a la calidad de su sabor, sino a las etiquetas que han sido firmadas por artistas famosos.
De acuerdo con Clarín, aunque el comprador estableció un nuevo récord, ha preferido mantenerse en el anonimato,
El récord anterior, lo obtuvo también una botella de Macallen que fue vendida en 1.065.829 dólares.
Sin embargo, se estima que la botella no dure mucho con el récord, pues muy pronto se llevará a cabo la subasta de una nueva botella de whisky, firmada por el británico Peter Blake.