Científicos e ingenieros del Ejército de Estados Unidos han realizado un hallazgo revolucionario al descubrir que un polvo a base de aluminio produce grandes cantidades de energía cuando entra en contacto con con cualquier líquido que contenga agua.
Durante un experimento, esos investigadores militares percibieron que la mezcla de agua con uno de sus materiales nanogalvánicos fabricado a base de aluminio provocó unas burbujas. Cuando analizaron el proceso, percibieron que el líquido se descomponía en sus moléculas de oxígeno e hidrógeno.
El aluminio ya se había utilizado en la producción de hidrógeno como combustible pero el proceso requiere tiempo, una temperatura elevada y electricidad extra o un catalizador que aumente el nivel de la reacción, que suele ser una sustancia química tóxica. En cambio, un kilogramo de estas nanopartículas produce hasta 220 kilovatios de energía en solo tres minutos.
Con este material, que se puede imprimir en 3D, esos especialistas estiman que podrían crear robots aéreos y terrestres que se autoalimenten y autodestruyan después de finalizar sus misiones o ayudar a los soldados que integren equipos de reconocimiento a recargar dispositivos móviles.
Con información de: RT