OPINIÓN SERGIO ALMAZÁN

El estrés financiero

En México pese a que en los últimos años se ha modificado la dinámica económica para algunos sectores de la población aún les es difícil cubrir todos sus gastos mínimos, lo que genera afectaciones en la salud física y mental.

El estrés financiero genera malestares físicos y psicológicos.
El estrés financiero genera malestares físicos y psicológicos. Créditos: Pexels
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A usted, ¿le alcanza su sueldo o salario para llegar a fin de mes?...  De ser positiva la respuesta, pertenece al 30% de la población asalariada de este país que lo puede hacer y siéntase afortunada. Según los datos de la Encuesta Nacional Financiera (ENSAFI)2023 que ha realizado y presentó recientemente el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI); donde se analizan y retrata la salud financiera de la población mexicana en los rubros alto, medio y bajo, así como por género: hombres y mujeres.

México, en los últimos seis años ha modificado su dinámica económica con el incremento del salario mínimo del 110% con respecto al 2017 y en el presente año de 20%, sin embargo, aún resulta para algunas regiones y sectores de la población insuficiente para cubrir los gastos mínimos que provocan estrés financiero derivado de falta de ahorros para afrontar un imprevisto, para cubrir una enfermedad o pagar deudas. Siendo el sector medio de la población quien presenta mayor dificultad para alcanzar un bienestar financiero óptimo, y de este rubro, las mujeres son quienes sufren más los trastornos físicos consecuencia del inadecuado manejo de sus finanzas. 

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Las consecuencias físicas del llamado estrés financiero están dolores de cabeza, trastornos gastrointestinales o cambios en la presión arterial en el caso de la población masculina, pero el 30% de las mujeres tuvieron consecuencias más impactantes en su salud al sufrir impactos psicológicos (depresión, ansiedad, irritación por periodos largos, trastornos del sueño o la alimentación). Y conforme aumenta la edad de la población económicamente activa, el ahorro disminuye y las deudas aumenta, la presión financiera se incrementa y el manejo del presupuesto se convierte más difícil consecuencia de sus dinámicas de consumo (manejo de tarjetas de créditos, préstamos en cajas de ahorro o sistemas informales o poco regulados de préstamos a plazos). Siendo los estados de Chiapas, Tamaulipas y Tlaxcala donde su población -sin importar el género– menos posibilidades de ahorros tienen.

La ENSAFI nos permite conocer la situación económica y su dinámica que la sociedad mexicana tenemos frente al manejo del dinero, las finanzas y la economía, así como las diferencias entre hombres y mujeres frente a la actividad económica personal y familiar. Y es quizá en este punto donde resulta muy interesante el manejo de los datos para dirigir políticas públicas de educación financiera doméstica, porque aún sigue existiendo inequidad económica por género en lo laboral y lo familiar, en lo institucional y colectivo, siendo las mujeres con menos ingresos y las más susceptibles a derivarse deudas por préstamos informales para sanear problemas familiares, pero son ellas quienes más ahorran con respecto a los hombres. Es decir, las finanzas y manejo del dinero en casa o familiares recae en el género femenino y por ello, el estrés financiero.

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Siendo la Ciudad de México, Zacatecas y Baja California los estados con mayores padecimientos físicos derivado del llamado estrés financiero, donde en el último año llevo a sufrir alguna consecuencia en la salud a las mujeres en los centros de salud, por no poder afrontar las dificultades económicas cotidianas.

En nuestra sociedad y cultura, tradicionalmente no se habla de dinero, de finanzas y mucho menos de crisis económicas, son los secretos de familia y hasta de mal gusto que alguien exprese alguna situación negativa en estos temas, pero debemos comenzar a hablar y educar en el manejo de la economía personal, familiar y social para aprender a manejar nuestros bolsillos y saber qué hacer en un imprevisto reduciendo el estrés financiero que no es un tema ligero en las crisis físicas que llegan a las salas del sector salud.

Abramos la discusión: @salmazan71