No es un renacimiento ni una renovación. La chica del gorro rojo regresa con una sonrisa que oculta la batalla ensangrentada de su mente. La fama y el reconocimiento llegaron tan abruptamente que es difícil creerse como un nuevo referente para la juventud. La chica sigue llena de dudas, pero está convencida que (por ahora) hoy es mejor que ayer.
Marie Ulven Ringheim, mejor conocida como Girl in Red, regresa con su segundo álbum “I’m Doing It Again Baby!”, en el que a través de 10 canciones presenta el estado de su mente, con una sonrisa honesta pero torcida en sarcasmo. Por fin acepta la paz que tanto buscó, aunque su propia mente le meta el pie para aceptar que la merece.
La chica de rojo canta fuerte una declaración de autoestima en “Doing It Again Baby”. Con un par de lentes oscuros, Marie sólo se cubre del brillo que deja a su paso. Siente la confianza que creía perdida desde su adolescencia, e invita a su amigos a conocer esta vieja-nueva Marie para explotar de nuevo las cuerdas de su guitarra, que juega con banjos, sintes y baterías electrónicas.
Marie recluta a Sabrina Carpenter en “You Need Me Now?”, para gritarle a un ex que no deja de molestarla. Aunque pertenezcan a escenas distintas, ambas se integran como la guitarra distorsionada y el beat electrónico: son las amigas disparejas que se divierten una noche para cantar y bailar. La plática y las burlas dejan el pasado muy atrás; el Ahora es más brillante y divertido en compañía de tus verdaderos amigos.
Con 25 años, sigue creciendo y madurando. En “Too Much”, Marie se da cuenta del gran daño que le dejó en su alma las palabras de una expareja, que la reprimía por ser “demasiado”, por ser “muy feliz”, “muy emocionante”, “muy ella”. Incluso en el mismo tema, Marie contiene su voz, aunque su corazón lata rápido; un grito disfrazado que pide empatía.
Marie, quien sufre de Trastorno de ansiedad generalizada y Trastorno obsesivo compulsivo, se tomó un tiempo para comprender su mente. En “Ugly Side”, expone la eterna lucha por ser quien es sin lastimar a las personas que más ama. Un bajo acecha desde sus rincones oscuros, como un Mr. Hyde que se escapa entre palabras hirientes. Pero no hay odio ni remordimiento, Marie quiere entender al monstruo para callarlo, y (quizá así) ser su mejor yo.
“¿Escuchas girl in red?”, se volvió en una forma discreta para preguntar en redes si alguien es homosexual. Girl in red, orgullosa de su identidad sexual, se convirtió sin querer en un referente de orgullo queer para les más jóvenes. Marie cuestionó por un tiempo tal reconocimiento, sin embargo, a su manera, ahora reconoce que hace la mejor “basura de (5 estrellas)”. Acusa a los artistas de locos por amar el trabajo de la fábrica musical, porque sabe lo crudo y cruel de sus ejecutivos. La honestidad de sus dudas es la razón por la que ha conectado con quienes siguen aprendiendo y creciendo, sin importar edad o género.
Después de un tiempo, de reflexionar, de descansar, Marie regresa feliz por saberse mejor que nunca. La duda sigue viviendo en el fondo de su mente, pero ella volverá, una y otra vez. No queda más que seguir. Regresará.