El 27 de mayo de 2023, la Cámara de Diputados del Estado de Texas votó para destituir al poderoso Fiscal General del Estado Ken Paxton. Desafiando a Donald Trump quien pedía a la Cámara de Diputados de Texas no destituir al Procurador, la Cámara votó abrumadoramente la destitución del Procurador General Ken Paxton, suspendiéndolo de su cargo por acusaciones de soborno y abuso de poder. La Cámara de Diputados voto 121 a favor y 23 en contra adoptando 20 artículos para llevarse a cabo un juicio político (impeachment) contra Paxton. La sorprendente votación reveló por primera vez una división dentro del Partido Republicano de Texas, el Partido Republicano estatal más grande, rico y poderoso de los Estados Unidos. Aunque el partido ha ganado todas las elecciones estatales durante un cuarto de siglo y ha controlado ambas cámaras desde 2003, vemos ahora las primeras fisuras.
En febrero de 2023, Paxton llegó a un acuerdo para terminar con la demanda de antiguos empleados quienes argumentaban que Paxton había terminado su empleo como una medida de represalia cuando ellos lo acusaron de sobornos. El acuerdo con los demandantes consistía en el pago de $3 millones de dólares, pero Paxton quería que esta cantidad saliera de las arcas del Estado de Texas, por lo que los legisladores estatales en ambas cámaras han sido cautelosos de aprobar los $3 millones de dólares pues dicen que el dinero de los contribuyentes no debe de usarse para pagar un acuerdo con los empleados que acusaron a Paxton de sobornos y abuso de poder. El 20 de julio pasado, se informó que un grupo pro-Paxton dio $3 millones de dólares al vicegobernador Dan Patrick para su campaña política, lo que ha levantado algunas voces diciendo que es el ejemplo clásico de la corrupción que existe en Texas. Dan Patrick no tendrá ninguna campaña hasta el 2026.
Pocos Fiscales Generales han sido tan poderosos como Paxton, quien empezó su ascendencia política cuando demandó a la administración del presidente Obama, así como a la del presidente Biden. Paxton es uno de los aliados más cercanos de Trump en Texas.
La atención ahora se desplaza al Senado de Texas, que llevará a cabo el juicio político el próximo 5 de septiembre contra Paxton, actuando la Cámara de Senadores como el jurado y 7 diputados republicanos y 5 diputados demócratas serán los que presenten la acusación ante el Senado y el vicegobernador (Lieutenant Governor) Dan Patrick actuara como el Juez (con $3 millones en la bolsa para favorecer a Paxton).
Muchos de los texanos llaman a esta contribución a Paxton, del grupo de extrema derecha nombrado “Defensa de la libertad de Texas”, simple y sencillamente como un soborno. Este grupo está compuesto por personas de extrema derecho, ultranacionalistas, fanáticos, racistas, fundamentalistas religiosos, en fin, todo lo que sea contra los mexicanos que consideran al igual que Trump una amenaza para Texas y quieren a como dé lugar se usen todas las medidas necesarias para impedir que los “hombres malos” sigan cruzando a Texas y de ahí el nombre que usan de “Defensa de la libertad de Texas”.
El que Texas esté controlado por el Partido Republicano estatal más grande, rico y poderoso de todo Estados Unidos nos dará una ligera idea que la política de inmigración cada vez será más severa contra nuestros compatriotas y estarán poniendo además de los alambres con púas en la frontera, miles de boyas esféricas con púas y navajas lo más grande posible a la mitad del rio Bravo para evitar que los indocumentados lleguen a Texas. Texas se salta olímpicamente cualquier tratado alegando que Texas no tiene ningún tratado con México. La cuestión humanitaria igualmente es irrisoria para el gobierno texano.
Mientras tanto, AMLO se burla y en sus mañaneras nos dice que es pura politiquería lo del muro flotante y pide a que los mexicanos no voten por el gobernador texano. ¿No se da cuenta que los indocumentados viven a la sombra de la población sin ningún derecho y menos el derecho a votar? AMLO solo quiere que el indocumentado siga mandando remesas, pero no hace nada por ellos. Poco sirve que el presidente presuma de todos los recursos que vienen de nuestros mexicanos de EUA sin darse cuenta de lo que pude hacer el fiscal o el gobernador de Texas, si inventaran un impuesto o un trámite especiales para remitir remesas.
Abramos los ojos a que, no obstante, el Fiscal de Texas es una figura mucho muy poderosa en Texas, tuvo que dimitir y estará enfrentando un juicio político por abuso de poder, mientras que en México seguimos esperando a que un día no muy lejano siquiera le abran una carpeta al a algún funcionario público del que ya se le cuestiona el buen manejo de los recursos federales.
La política de México como su política exterior es ya peor que jugar a serpientes y escaleras. Así como subes el juego, el propio gobierno te baja en un minuto sin dejarte con ningún incentivo.
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