“Tengo la honra de poner en su conocimiento que el gobierno español, como resultado de las conversaciones mantenidas por representantes de ambos Gobiernos, ha decidido establecer relaciones diplomáticas con Méjico (sic) y acreditar en la capital una Misión Diplomática Permanente a nivel de embajador” … Con esta nota diplomática fechada el 28 de marzo de 1977 México y España establecían relaciones diplomáticas que este 2022 se cumplen 45 años de restablecer vínculos no sólo político-comerciales sino culturales, educativos y de fraternidad.
Historia que comienza en 1492 y más específicamente desde 1519 en que Cortés y sus huestes arribaron a la gran ciudad de Tenochtitlan hasta la derrota de los mexicas dos años más tarde y por espacio de 300 años se construyó una nueva civilización y cultura conformando lo que es la identidad mexicana: herencias mutuas, mestizaje, encuentros, desencuentros, una lengua compartida acercanzas y distanciamientos y dos idiomas que dialogan e intercambian visiones del mundo, expresiones y reconocen sus diferencias en una conversación inagotable que llamamos hispanidad.
El pasado 12 de octubre la Residencia de la Embajada de España abrió sus puertas para celebrar la Hispanidad enmarcada en la Fiesta Nacional y sus anfitriones, el recién llegado Embajador Juan Duarte Cuadrado y su señor esposo Mick Daly se estrenaban en un acto social-político donde ellos eran la cabeza de la ceremonia y el momento para trazar las líneas diplomáticas de su ejercicio y proyecto que trae como plan de trabajo y que enmarcó en su discurso en cuatro pilares: La proximidad, la confianza, el respeto y el agradecimiento que tradujo en acciones: un marco jurídico para la seguridad comercial que incremente las inversiones españolas a México; además de considerar que México es el sexto inversor en España y nuestra nación el primer destino de exportación en Iberoamérica.
Otro de los aspectos que refuerzan la fuerte relación entre ambas naciones es el ámbito educativo; como lo señaló el embajador los estudiantes mexicanos siguen incrementando su presencia educativa en España, entre 2021-2022 se ha incrementado los visados en 10% de la matrícula académica, por lo que requiere el consulado español en sus tres sedes: Ciudad de México, Monterrey y Guadalajara, digitalizar los servicios consulares.
El reto de las relaciones binacionales, para Duarte Cuadrado y quizá de las mejor oportunidades en todos los ámbitos para nuestro país es en 2023 cuando España asuma la presidencia española de la Unión Europea donde se busca acercar las dos orillas de los dos bloques con la Cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC) impulsar el acuerdo globalizado entre la Unión Europea y México, proyecto ambicioso ,pero con retos importes, tras un periodo duro y áspero consular que asume el nuevo embajador como reto y deseo de establecer puentes más amistosos y provechos para ambas naciones.
Al finalizar su discurso, el nuevo embajador evocó una palabra de su lengua española que Javier Marías en sus últimos textos incluyó para evitar que quede en el olvido y como el propio escritor dijo en una ocasión: “a nadie le gusta asesinar palabras, es como acallar el idioma, matar la lengua”. Y esa palabra es acercanza que es la proximidad, la relación y cercanía… “con los que nos define a los españoles y mexicanos” concluía el Embajador de España Juan Duarte Cuadrado. Un idioma y dos lenguas que sintetizan el enorme, profundo, fuerte y definitivo puente, memoria, lazo y espejo donde nos reflejamos, conectamos, aproximamos y somos cercanos los mexicanos con los españoles y viceversa.
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