A principios de semana, los organizadores del festival Vive Latino anunciaron el line up de su edición de 2022.
Las reacciones fueron sobre todo y de todo, desde las sonadas críticas por incluir a la banda regional MS en su cartel hasta la falta de grandes bandas internacionales en esta edición; en algunas charlas de café virtual la conclusión, en tono de broma, rondaba entre que esa edición debería ser gratuita o bien, deberían pagar por ir (en mis charlas sí).
Pero hay de menos tres puntos que llaman la atención de esta columna. Procedo.
En un line up robusto en cantidad, pero grandes vacíos, el primero y más interesante personaje para escuchar y ver es Gary Clark Jr. Muy probablemente en México, la popularidad de Clark probablemente no es ni la cuarta parte de lo que es en Estados Unidos o Reino Unido.
Les cuento: Gary Clark Jr. fue catalogado en 2019 por la prestigiosa e influyente revista Guitar World como uno de los 20 guitarristas de la década (entre figuras gigantescas como Steve Vai, Joe Satriani, Joe Bonamassa y John Petrucci) y la misma publicación le dedicó una de sus cuatro portadas exclusivas de diciembre de ese año por la misma razón; fue un joven prodigio del blues, soul y jazz, tanto que antes de cumplir los 18 años, se instauró el 3 de mayo de 2001 como el Día de Gary Clark Jr., en su ciudad natal Austin, Texas.
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Una de sus presentaciones más famosas mundialmente sucedió en 2012, Clark fue invitado a unirse a tocar a la Casa Blanca con leyendas del blues como B.B. King, Buddy Guy, Jeff Beck, Mick Jagger y Red, White and Blues. Se ha presentado en festivales monstruosos como el Glastonbury y en ediciones internacionales del Rock in Rio.
Inequívocamente, es la propuesta más elegante y atrevida en un festival que hoy es muchísimo más diverso y hasta desordenado en géneros musicales. ¿Solamente Clark valdría la pena? Decídanlo y vayan si se atreven, pero si lo hacen seguramente descubrirán (si es la primera vez) o disfrutarán a un gran virtuoso de la guitarra y eso sí, quién sabe cuándo vuelva a México.
Segundo. Limp Bizkit, la banda de inicios n\u00fc metal liderada por Fred Durst todavía está en su etapa de resurgimiento y viene de una serie de presentaciones que retomaron en Estados Unidos después de la suspensión de conciertos por pandemia. Los detractores de aquel subgénero, al parecer siguen teniéndoles el mismo resentimiento de hace 20 años, pero en aquella presentación del Domination, en la edición de estreno del festival en mayo de 2019, demostraron que tienen mucho público mexicano nostálgico de su lado; así que váyanse con cuidado porque pueden armar un gran escándalo.
Tercero. Otra vez Pixies. Son una banda incomprendida para muchos y algunos otros, la consideran sobrevalorada, que cada quien piense lo que quiera, pero a veces parece demasiado pagar un boleto para cantar la frase "Where is my mind?", una y otra vez hasta el cansancio por cinco minutos (éxito indiscutible, más popular y pegador sin duda). La banda tiene grandes fanáticos en este país o es que sólo les gusta cantar esa frase en coro monumental (broma); son una gran banda, ojalá más de sus canciones fueran coreadas como la mencionada.
Como sea, me cuentan si van, desde acá los leeré.
TRACK BY TRACK
TRACK 01.- Deep Purple estrenará disco de covers. Probablemente de lo único que Deep Purple nunca ha hecho en las décadas de carrera que suma es la edición de álbum completo de reversiones y el próximo 26 de noviembre, lanzará su vigésimo primer disco titulado "Turning To Crime" a través del sello earMUSIC. El LP incluye versiones de Gillan, Paice, Glover, Airey y Morse de grandes clásicos del rock, originales de Bob Dylan, Fleedwood Mac, Cream, The Yardbirds y Bob Seger. La banda ha dicho sobre esta producción que aunque las canciones han sido escritas por otros, el resultado es 100 por ciento Deep Purple. Hace unos días, se publicó el video oficial de "7 And 7 Is", el primer single de 12 canciones. Esta nueva producción producida por Bob Ezrin, saldrá sólo 15 meses después del lanzamiento de "Whoosh!". ¡Súbanle a los speakers!
Recuerden que la mejor música es la que se escucha ¡a todo volumen!