La periodista y conductora de noticias Débora Estrella, quien falleció trágicamente el pasado 20 de septiembre en un accidente aéreo en García, Nuevo León, no solo destacó por su profesionalismo frente a las cámaras, sino también por una pasión que la acompañó hasta sus últimos días: la equitación.
Para Débora, montar a caballo no era un simple hobby, sino una verdadera terapia. Ella misma lo describía como su refugio y su manera de equilibrar la intensidad del periodismo con la serenidad de la naturaleza.
En redes sociales se autodenominaba “horse girl” y con frecuencia compartía imágenes de establos, entrenamientos y tardes al aire libre junto a sus caballos.
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En julio pasado, escribió: “Esta experiencia que viví con ellos cambió mi vida. Soy y seré horse girl por siempre”.
¿Dónde practicaba esta actividad?
La comunicadora encontraba en el Yellowstone Club Ecuestre, ubicado en la Carretera Nacional en Santiago, el lugar ideal para practicar y conectar con su pasión. Ahí vivía momentos que describía como únicos, llenos de adrenalina y emoción.
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En una de sus publicaciones, dejó en claro lo que significaba para ella esta actividad: “No hay sensación parecida a esto… entre el miedo, la adrenalina y la emoción”, acompañando sus palabras con fotografías montando a caballo.
Aunque su carrera periodística fue reconocida en medios como Multimedios y Milenio, Débora Estrella también será recordada por su faceta como amazona, un título con el que ella misma se identificaba.