En plena canícula en Nuevo León, las principales presas aún mantienen niveles favorables con más del 74 por ciento de su capacidad. Sin embargo, han perdido hasta 28 puntos porcentuales y millones de metros cúbicos desde enero de 2025.
A ocho meses del inicio del año, las principales presas de Nuevo León muestran una disminución en su nivel de almacenamiento, aunque todavía se mantienen en cifras favorables para el abasto de agua durante la temporada de calor.
En enero, tras un evento climático atípico de lluvias y aguanieve, las presas El Cuchillo, Cerro Prieto y La Boca alcanzaron niveles históricos, superando incluso el 100 por ciento de su capacidad total. Sin embargo, ESTE mes de agosto el panorama ha cambiado ligeramente.
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El caso más notorio es el de la Presa El Cuchillo, que en enero alcanzó un 102.88 por ciento y actualmente se encuentra en 74.5 por ciento, lo que representa una disminución de 28.38 puntos porcentuales. Es decir, disminuyó 318.522 millones de milímetros cúbicos en ocho meses.
La Presa Cerro Prieto también muestra una baja, aunque moderada, pasó de 116.04 a 93.3 por ciento, es decir 22.74 puntos menos. En milímetros cúbicos la presa en ocho meses disminuyó a 68.438 millones de milímetros cúbicos.
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En tanto, la Presa La Boca bajó de 94.40 a 93 por ciento, con apenas una reducción de 1.4 puntos porcentuales, equivalente a 4.714 millones de milímetros cúbicos disminuidos de enero a agosto de 2025.
Estas variaciones reflejan un descenso sostenido por el uso constante del recurso y el desfogue hacia el estado de Tamaulipas, pero también evidencian que, pese a la reducción, el estado continúa en una situación estable en materia hídrica.
Las autoridades mantienen un monitoreo diario para garantizar el abasto, especialmente en plena temporada de canícula, así como exhortan a los habitantes de Nuevo León a hacer uso responsable del vital líquido.