A más de tres años del feminicidio de Debanhi Susana Escobar Bazaldúa, sus padres, Mario Escobar y Dolores Bazaldúa, anunciaron que contratarán a un cuarto perito para revisar el trabajo realizado por la Fiscalía de Nuevo León y la Fiscalía General de la República (FGR).
En entrevista, Mario Escobar explicó que buscan una nueva valoración del peritaje realizado por el experto guatemalteco, contratado por ONU Mujeres, así como de las pruebas obtenidas en los procesos de inhumación y exhumación del cuerpo de la joven.
"El primer peritaje de la Fiscalía de Nuevo León discrepa mucho con lo de la exhumación. Nosotros pensábamos que en México se daría celeridad, lo cual no vemos. Nos sentimos vulnerados en nuestros derechos humanos", expresó Escobar.
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El caso, que generó atención mediática a nivel internacional, aún no tiene una resolución definitiva. Incluso a nivel federal, la FGR se ha negado a clasificar oficialmente el hecho como feminicidio.
A tres años y tres meses de la desaparición de Debanhi, sus padres insisten en que su hija no murió tras caer accidentalmente en la cisterna del Motel Nueva Castilla, sino que fue víctima de feminicidio y su cuerpo fue colocado en ese lugar.
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"Debanhi nunca estuvo en el motel. Fue puesta ahí. Todo comenzó en Alcosa, donde fue privada de su libertad, asesinada, y no sabemos qué más ocurrió en esos ocho días. Fue un feminicidio", afirmó Escobar.
El próximo miércoles se llevará a cabo una reunión en las instalaciones de la FGR con la participación de representantes de la Secretaría de Gobernación, la Comisión Nacional de Búsqueda, la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas, entre otros organismos.