En el sur de Nuevo León, entre las formaciones rocosas que alguna vez estuvieron cubiertas por un vasto mar, se encuentra el legado de una criatura colosal que surcó los antiguos océanos hace aproximadamente 150 millones de años. Se trata del "Monstruo de Aramberri", un gigantesco reptil marino cuyo hallazgo despertó el interés de la comunidad científica y los amantes de la paleontología.

El descubrimiento ocurrió en 1984 cuando un estudiante de la Facultad de Ciencias de la Tierra de la Universidad Autónoma de Nuevo León (UANL) realizaba un mapeo geológico en la formación de La Casita, dentro del municipio de Aramberri. Durante su exploración, se topó con fragmentos de huesos fosilizados, lo que inicialmente se pensó que eran restos de dinosaurio; sin embargo, las investigaciones posteriores revelaron que se trataba de un pliosaurio, un reptil marino depredador de gran tamaño.
Los pliosaurios fueron un grupo de plesiosaurios caracterizados por su cuello corto, mandíbulas poderosas y una envergadura formidable. Estas criaturas dominaron los mares del Jurásico y el Cretácico, coexistiendo con los dinosaurios terrestres. Se estima que el "Monstruo de Aramberri" medía entre 14 y 18 metros de largo, aunque en un principio se especuló que su tamaño superaba los 20 metros, lo que generó comparaciones con el liopleurodon, otro pliosaurio gigante encontrado en Francia.
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El impacto del descubrimiento llegó incluso a la cultura popular, ya que en el documental de la BBC "Caminando con Dinosaurios", el liopleurodon recreado en la serie fue inspirado en las dimensiones atribuidas originalmente al ejemplar neolonés. No obstante, el género y especie exactos del "Monstruo de Aramberri" siguen siendo indeterminados, ya que el material encontrado no permite una clasificación definitiva.
Este hallazgo reafirma la importancia de Nuevo León como un territorio rico en restos paleontológicos, testigos de un pasado en el que los mares cubrían la región y donde criaturas extraordinarias reinaban en los océanos prehistóricos. Investigaciones continúan en la zona para arrojar más luz sobre esta impresionante criatura que alguna vez dominó los mares del Jurásico.