El 2025 ha sido calificado por las autoridades estatales como un año complicado y sin lluvias, pues los pronósticos asociados al fenómeno meteorológico denominado La Niña indican que habrá menos precipitaciones a la entidad, informaron durante la sesión del Consejo Estatal de Protección Civil.
En el evento, encabezado por el Secretario General de Gobierno, Javier Navarro, representantes de Protección Civil del Estado y los municipios, así como funcionarios estatales y federales, incluidos la Sedena, Conagua y Conafor, mencionaron que se espera una menor cantidad de precipitaciones pluviales en comparación con el año anterior.
Las autoridades destacaron que esta situación podría ser desfavorable para los municipios no metropolitanos, especialmente en la zona sur del estado, donde se estima una reducción de hasta un 70% en las lluvias, mientras que la región citrícola podría experimentar una disminución del 60% y la región oriente un 45%.
En 2024 se registraron 23 incendios forestales, pero para este año se prevé que la actividad forestal sea mucho mayor, debido a que en diversas zonas del estado existen materiales que pueden ser fácilmente utilizados para iniciar incendios, según lo señaló Asucena Estrada Ibarra, de la Promotoría de Desarrollo Forestal de Nuevo León.
¿Qué es La Niña?
La Niña se produce cuando las temperaturas superficiales del océano en el Pacífico ecuatorial disminuyen por debajo de los niveles normales, generando anomalías que afectan la circulación atmosférica global.
Este fenómeno provoca cambios climáticos extremos en diferentes latitudes, desde lluvias intensas en algunas zonas hasta sequías en otras.
¿Cómo afectará La Niña a Nuevo León?
Para Nuevo León, el fenómeno de La Niña traerá un invierno con periodos de frío extremo alternados con días cálidos. La primera quincena de enero se caracterizó por temperaturas fluctuantes, pero se espera que la segunda quincena marque la llegada de masas de aire polar y ártico, con altas probabilidades de heladas severas e incluso nevadas en las zonas altas del estado.
Los expertos advierten que hacia finales de enero y principios de febrero podrían registrarse vientos fuertes y eventos de “Norte” que intensifiquen la sensación de frío. Aunque febrero iniciaría con un incremento gradual de las temperaturas, las masas de aire frío seguirán presentes, regulando el ambiente en la región.