André-Pierre Gignac cumplió el pasado miércoles 40 años convertido en una auténtica leyenda del futbol regiomontano. Pero más allá del festejo, el francés espera que su mejor regalo llegue mañana, cuando Tigres dispute la vuelta de las Semifinales ante Cruz Azul con la posibilidad de avanzar a una nueva Final de la Liga MX.
Durante una década, Gignac ha sido pieza clave en la transformación histórica de Tigres, desde su llegada en 2015, el atacante ha acumulado títulos, récords y actuaciones decisivas que lo mantienen como un referente absoluto del club, incluso ahora que celebra cuatro décadas de vida.
Una leyenda que sigue vigente
Aunque ya no es titular indiscutible bajo el mando de Guido Pizarro —solo ha iniciado 6 de los 20 partidos del semestre, incluyendo Liguilla—, Gignac sigue siendo determinante.
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El francés dejó atrás la lesión que lo alejó varios meses de las canchas y regresó para aportar experiencia y peso ofensivo.
En la vuelta de los Cuartos de Final ante Tijuana, Pizarro le dio la confianza de arrancar y el delantero respondió con sacrificio, movilidad y compañerismo, incluso cediendo un penal a Juan Brunetta.
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Una carrera llena de títulos y récords
En sus 10 años con Tigres, Gignac ha conquistado cinco títulos de Liga MX, tres campeonatos de goleo y dos Balones de Oro.
También fue clave para que en 2020 los felinos levantaran por primera vez la Liga de Campeones de Concacaf, el único título internacional en la historia del club.
Además, es el máximo anotador en la historia de los Clásicos Regios, con 14 goles.
Aunque en su momento declaró que su retiro llegaría en diciembre de 2025, recientemente extendió contrato hasta junio de 2026, dejando abierta la puerta para seguir incrementando su legado.