El año 2025 está por concluir y, con el depósito del aguinaldo, las familias en Nuevo León se enfrentan a la tradicional disyuntiva: destinar este ingreso extra a los festejos decembrinos o asegurar la estabilidad financiera del próximo ciclo.
Especialistas en finanzas personales advierten que anticiparse a los impuestos de inicio de año es la estrategia más efectiva para evitar el estrés financiero y arrancar el 2026 con un balance positivo.
No te olvides de pagar el predial
Aunque el consumo en regalos, cenas y viajes es común en estas fechas, planear el cumplimiento de obligaciones fiscales permite aprovechar beneficios exclusivos. Uno de los compromisos más importantes es el impuesto predial.
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En Nuevo León, la mayoría de los municipios ofrecen atractivos descuentos por pronto pago durante enero y febrero. Cumplir con esta obligación de forma anticipada no solo protege el patrimonio, sino que representa un ahorro directo para el bolsillo familiar.
Ahhh también guarda para el refrendo
Otro gasto ineludible es el refrendo vehicular. Aunque en la entidad la tenencia está mayoritariamente subsidiada, el pago del refrendo es indispensable para mantener las placas vigentes y evitar multas. A esto se deben sumar otros gastos preventivos que suelen vencer en el primer trimestre, como la renovación del seguro del automóvil y la licencia de conducir, elementos críticos para circular con legalidad y seguridad.
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¿Cómo usar el aguinaldo con inteligencia?
Los expertos sugieren un método sencillo:
- Presupuestar: Revisar los pagos realizados el año anterior en predial y refrendo.
- Apartar: Colocar ese monto en una cuenta de ahorro separada de los gastos diarios.
- Priorizar: Realizar los pagos en la primera semana de enero para garantizar los descuentos máximos.
Para los emprendedores y pequeños negocios, la previsión es aún más relevante. Enero marca el inicio de declaraciones provisionales, el pago del Impuesto Sobre Nóminas (ISN) y la renovación de licencias municipales. Mantener una comunicación fluida con el contador y reservar una parte de las utilidades de diciembre para estas obligaciones evitará el uso de créditos costosos para cubrir gastos operativos al inicio del año.