La investigación en torno al feminicidio de Yaneli Pardo, de aproximadamente 38 años, ocurrido en el sector Cumbres Mediterráneo, apunta a que su presunto agresor, Alejandro “N”, de 40 años, no solo era su compañero de trabajo, sino que también habría tenido un lazo familiar como padrino de una de sus hijas, según informaron fuentes cercanas al caso.
Tanto la víctima como el presunto agresor laboraban en el área de Tesorería y Divisas de la torre administrativa Campestre de Grupo Afirme.
De acuerdo con las primeras indagatorias, la principal línea de investigación se centra en una discusión relacionada con temas financieros, aunque no se descarta un vínculo sentimental entre ambos.
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Durante la revisión de los videos de seguridad, se aprecia que Yaneli grita “comadre” mientras intenta pedir auxilio al momento del ataque, lo que refuerza la hipótesis de un lazo de compadrazgo o cercanía personal entre el agresor y su familia.
Yaneli, quien era madre de dos menores, deja en orfandad a una niña de 2 años y un niño de 3.
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¿Cómo ocurrió el crimen?
El crimen se registró en el cauce de un arroyo del sector Cumbres Mediterráneo, al poniente de Monterrey.
En el sitio, las autoridades localizaron una camioneta Toyota Rav-4 volcada con placas de San Luis Potosí, y a la víctima sin vida con un disparo en la cabeza.
En un inicio se pensó que se trataba de un accidente vial, sin embargo, las grabaciones obtenidas por cámaras de seguridad revelaron que Yaneli fue atacada antes de perder el control del vehículo.
En las imágenes se observa a un hombre vestido de negro que la agrede físicamente y se escuchan detonaciones de arma de fuego. La víctima intenta huir, pero es alcanzada nuevamente y ambos suben al vehículo, mientras el agresor toma un objeto de un automóvil blanco, lo que sugiere una posible planeación del ataque.
El presunto agresor fue hallado sin vida
Horas después del crimen, las autoridades localizaron un vehículo Audi a unos metros del lugar del ataque, presuntamente perteneciente al agresor.
El caso dio un giro cuando, más tarde, Alejandro “N” fue encontrado muerto en una habitación del Hotel Plaza de Oro, en el centro de Monterrey.
De acuerdo con los primeros reportes, el hombre se habría quitado la vida utilizando un objeto punzocortante.
La Fiscalía General de Justicia de Nuevo León continúa con las indagatorias para establecer el móvil exacto del feminicidio y confirmar si existía una relación personal entre la víctima y su agresor.
Mientras tanto, el caso ha generado atención debido al entorno laboral y familiar compartido, así como por las circunstancias en que ambos perdieron la vida.
