Originario de Monterrey, Brincos Dieras descubrió su talento artístico desde niño al formar parte del coro de su iglesia.
Su primera experiencia como payaso surgió casi por accidente durante un evento del Día del Niño, cuando se colocó una peluca y maquillaje para entretener a los pequeños.
¿Cómo nació el nombre de Brincos Dieras?
Lo que comenzó como una simple dinámica se convirtió en el inicio de una carrera que hoy celebra más de 30 años de éxitos.
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Antes de convertirse en el fenómeno que llena arenas y estadios, Brincos Dieras —cuyo nombre artístico nació de la frase “brincos dieras ser como él”— fue monaguillo y maestro de jóvenes. Incluso, confesó que su sueño era ser sacerdote, pero su carisma y sentido del humor lo llevaron por otro camino: el del entretenimiento.
Durante una entrevista en Exa, el payaso más popular de México recordó que su estilo único nació de la interacción con el público.
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“El 50% de mi show lo hace la gente”, comentó. Su humor rápido, improvisado y con un toque irreverente se ha convertido en su sello, conquistando no solo escenarios nacionales, sino también públicos en Estados Unidos.
Con más de 200 videos en YouTube y millones de reproducciones en TikTok, Brincos Dieras se ha consolidado como un ícono de la comedia popular mexicana. Pese a su fama, mantiene los pies en la tierra: asegura que nunca ve sus propios videos porque le da “pena” verse en pantalla.
El artista también compartió que su característico maquillaje, el cual mantiene desde hace dos décadas, lo aprendió a hacer por sí mismo. En una ocasión, incluso tuvo que maquillarse con la mano izquierda tras sufrir una fractura.
“Ahí entendí que la actitud lo es todo”, recordó entre risas.
Brincos Dieras ha logrado que su personaje trascienda generaciones gracias a su conexión con el público.
Desde shows en pequeños salones hasta llenar recintos con más de 45 mil personas, el comediante regiomontano ha demostrado que la risa sigue siendo su mejor herramienta para unir a la gente.