El Club Tigres confirmó que André-Pierre Gignac fue sometido a una cirugía este jueves 29 de enero debido a una ruptura parcial del tendón del plantar delgado en su pierna derecha, además de los problemas musculares y el desgarro en el tendón de Aquiles que venía arrastrando.
Las constantes molestias físicas han limitado la participación del delantero en el actual torneo, lo que ha generado incertidumbre sobre su continuidad en el equipo, ya que su contrato con los felinos finaliza en junio de este año.
¿Qué es el tendón de Aquiles y por qué es tan importante?
El tendón de Aquiles es la estructura fibrosa más fuerte y gruesa del cuerpo humano, conectando los músculos de la pantorrilla (gastrocnemio y sóleo) con el hueso del talón (calcáneo). Su función principal es permitir movimientos como correr, saltar y caminar, por lo que es crucial en el rendimiento de los deportistas.
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Las lesiones en este tendón pueden ser desde inflamaciones leves (tendinitis) hasta rupturas parciales o totales, que requieren intervenciones quirúrgicas y largos periodos de recuperación.
¿Cómo afecta una lesión en el tendón de Aquiles a un futbolista?
Para un jugador de alto rendimiento como Gignac, una lesión en esta zona es particularmente preocupante, ya que impacta directamente en su capacidad de aceleración, cambios de ritmo y estabilidad. La recuperación de una cirugía en el tendón de Aquiles suele ser prolongada y puede requerir entre cuatro y seis meses de rehabilitación, dependiendo de la gravedad del caso.
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Con su contrato próximo a finalizar y las lesiones acumuladas en los últimos torneos, la incertidumbre sobre el futuro de Gignac en Tigres aumenta; aún no se ha brindado información sobre el proceso de recuperación ni cuando podría volver a la cancha.