Protección Civil Nuevo León ha emitido una alerta ante el Potencial Ciclón Tropical, actualmente localizado a 260 km al oeste de Celestún, Yucatán, y aproximadamente a 575 km al este-sureste de La Pesca, Tamaulipas.
Este fenómeno presenta vientos máximos sostenidos de 65 km/h con ráfagas de hasta 85 km/h, moviéndose lentamente hacia el norte a 9 km/h y con una presión mínima central de 999 hPa.
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Las bandas nubosas asociadas al fenómeno están provocando lluvias fuertes (25-50 mm) en Nuevo León, el fenómeno también esta provocando lluvias torrenciales (de 150 a 250 mm) en Campeche y Chiapas; intensas (de 75 a 150 mm) en Oaxaca, Puebla, Quintana Roo, Tamaulipas, Veracruz y Yucatán; muy fuertes (de 50 a 75 mm) en Hidalgo, Tabasco y San Luis Potosí, según los reportes meteorológicos más recientes.
Según las proyecciones meteorológicas, se espera que la amplia circulación del ciclón tropical ocasione lluvias significativas en Nuevo León. Se anticipan lluvias puntuales fuertes en varias partes del estado, con la posibilidad de acumulaciones importantes que podrían generar problemas como inundaciones repentinas, encharcamientos y deslizamientos de tierra, especialmente en áreas propensas.
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Las condiciones climáticas se intensificarán a partir del miércoles y se mantendrán durante el jueves y parte del viernes, con lluvias que podrían ser localmente intensas en ciertas regiones de Nuevo León. Como medida preventiva, se ha establecido un alertamiento por efectos de tormenta tropical desde la desembocadura del Río Grande hasta Altamira, Tamaulipas.
De acuerdo al pronóstico de precipitación en el area metropolitana se espera de 75 a 150 mm de acumulación de agua, mientras que para el jueves se tiene el mismo panorama; por otra parte, el viernes 21 de junio habrá de 05 a 25 mm puntuales al igual que el sábado 22 de junio.
Se exhorta a la población a mantenerse informada a través de los canales oficiales de Protección Civil y a seguir las recomendaciones de seguridad, como evitar cruzar arroyos o ríos crecidos y estar preparados para posibles cortes de energía eléctrica y afectaciones en la infraestructura urbana.