A pesar de la crisis hídrica que ha azotado a Monterrey y el área metropolitana en los últimos años, nada se compara con las imágenes proyectadas con inteligencia artificial.
En este ejercicio realizado para darnos una idea de cómo sería la capital de Nuevo León en un futuro como ciudad desértica, se aprecia el primer cuadro de la ciudad gris y sin los característicos árboles de la Macroplaza.
Gracias a estas herramientas podemos tener un panorama de como luciría el primer cuadro de la ciudad donde uno de los pulmones como el Parque Fundidora, parece haber desaparecido debido a la escasez de agua.
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En la proyección a futuro, los emblemáticos edificios y el marco de las montañas siguen formando parte de los paisajes urbanos de Monterrey, pero es evidente la nostalgia y hasta cierto temor que trasmiten, dadas las condiciones de sequía que ha azotado a la región durante los últimos años.
Por muy apocalíptico que se vean estas imágenes, dada la situación que se ha vivido en la entidad en años recientes debido a la crisis del vital líquido, no parecen nada ajeno a la realidad que pueden enfrentar los regiomontanos dentro de algunos años.
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Crisis del agua en Nuevo León
El año 2022 el estado de Nuevo León enfrentó la peor crisis hídrica de los últimos 30 años, donde las medidas emergentes provocaron cortes en el suministro en la mayoría de las colonias del Estado.
Los niveles de las reservas de las presas Cerro Prieto y La Boca descendieron considerablemente hasta llegar a estar por debajo del 5 por ciento de su capacidad.
La zona metropolitana de Monterrey solo disponía de 13 mil 500 litros de agua por segundo, cuando el consumo regular diario es de 16 mil 500 litros por segundo.