El día de ayer se conmemoraron dos años desde la desaparición y posterior fallecimiento de Debanhi Escobar Bazaldúa, sin que se haya revelado un significativo progreso en la investigación de las circunstancias que rodearon su trágica pérdida. A pesar de que el caso ha sido revisado por las autoridades tanto de Nuevo León como por la Fiscalía General de la República, aún persiste la incertidumbre sobre lo sucedido.
Desde entonces, la comunidad ha expresado su indignación a través de reclamos ciudadanos, marchas y bloqueos organizados por diversos colectivos, sin embargo, a pesar de ello, las tan esperadas respuestas por parte dela FGR continúan sin llegar.
Debanhi, era una estudiante de Derecho en la Universidad Autónoma de Nuevo León (UANL), salió con amigas para asistir a una fiesta, sin imaginar que ya no regresaría a casa. El 9 de abril desapareció en la Carretera a Laredo, cerca del Motel Nueva Castilla.
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El caso cobró notoriedad horas después, cuando una foto de la joven se viralizó, mostrándola sola en la orilla de la carretera en plena madrugada, en una zona considerada de alto riesgo.
El cuerpo de la joven fue encontrado en una cisterna del motel el 21 de abril, después de que la zona fuera buscada en varias ocasiones. Este hallazgo marcó el comienzo de una serie de obstáculos en la investigación, que finalmente condujeron al cese de los fiscales Rodolfo Salinas y Javier Caballero el 27 de abril de 2022. Salinas estaba a cargo de Personas Desaparecidas y Caballero de Antisecuestros.
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La Fiscalía Estatal reveló la hipótesis de que la muerte de Debanhi podría haber sido accidental, sugiriendo que cayó a la cisterna y sufrió lesiones al golpearse.
La familia de Debanhi llevó a cabo su propia investigación pericial, la cual sugirió que la joven había sido asesinada. Este hallazgo motivó la intervención de la Fiscalía General de la República (FGR) en el caso, con el fin de apoyar en las labores de investigación sobre las causas de la muerte. Los resultados revelaron que la joven había sido asfixiada por sofocación entre 3 y 5 días antes del descubrimiento de su cuerpo.
A pesar de que el caso fue llevado ante el Presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, debido a la falta de avances por parte de la Fiscalía Estatal, la situación no mejoró. El 29 de septiembre de 2022, la Fiscalía General de la República tomó las riendas de las investigaciones. Sin embargo, dos años después, las autoridades federales aún no han logrado avanzar en el caso, manteniendo la incertidumbre y la falta de progreso.
Se podría afirmar que las resoluciones se encuentran en un estado de incertidumbre, ya que ninguna autoridad ha llegado a una conclusión definitiva.