Desde sus humildes inicios como estudiante de química industrial, Blanca Muñoz Flores ha trazado un impresionante camino como inventora en la Universidad Autónoma de Nuevo León (UANL).
Con ocho patentes otorgadas y 19 solicitudes en trámite ante el Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial (IMPI), la doctora Muñoz se ha destacado como una de las mentes más innovadoras en su campo.
Originaria de Tlaxcala, Muñoz Flores completó su posgrado en el Centro de Investigación y Estudios Avanzados del Instituto Politécnico Nacional (Cinvestav), además de una estancia de investigación en la Universidad de Paul Sabatier en Toulouse, Francia. En 2008, se unió a la Facultad de Ciencias Químicas de la UANL, donde ha combinado la investigación con la docencia, encontrando en esta última su pasión por compartir conocimientos.
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La contribución de Muñoz a la investigación no pasa desapercibida. Entre sus logros destacan su trabajo en pigmentos como tintes biológicos para identificar células cancerígenas, demostrando un compromiso con la innovación y la búsqueda de soluciones en el ámbito científico.
Su éxito ha sido reconocido no solo en la UANL, sino también a nivel nacional e internacional. En 2012, recibió su primera patente del IMPI, y desde entonces ha acumulado un impresionante récord de ocho patentes otorgadas. Además, es miembro del Sistema Nacional de Investigadores Nivel 2 y evaluadora acreditada por el CONAHCYT.
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Blanca Muñoz Flores no solo es una figura destacada en el campo de la investigación, sino también un modelo a seguir para las universitarias.