TENDENCIA

Que nunca debes regalar en navidad, según el Feng Shui

El Feng Shui aconseja evitar regalos que se asocian con energías negativas o simbolismos desfavorables,

Créditos: Canva
Por
Escrito en NUEVO LEÓN el

La Navidad es una época de generosidad y buenos deseos, pero el Feng Shui, la filosofía china que busca equilibrar la energía en los espacios y objetos, ofrece ciertas recomendaciones sobre qué evitar regalar para no atraer energías negativas. .

Estas sugerencias se basan en simbolismos que podrían tener un impacto no deseado en la vida del receptor.

Objetos cortantes: un "corte" en las relaciones

Regalar cuchillos, tijeras o cualquier objeto afilado se asocia con cortes simbólicos en la relación entre el receptor y el obsequiante.

Según el Feng Shui, estos elementos representan la ruptura de la armonía, algo que no se desea en esta temporada.

Relojes: un límite al tiempo

Aunque son comunes como obsequios, los relojes pueden ser mal interpretados en esta filosofía, ya que simbolizan la cuenta regresiva del tiempo.

Se considera que regalar un reloj podría significar que la relación tiene un límite o que el tiempo de vida del receptor está siendo señalado.

Espejos: portales de energía

Los espejos son objetos poderosos en el Feng Shui, pero al regalarlos, existe el riesgo de que reflejen y amplifiquen energías negativas, especialmente si no se colocan en el lugar adecuado. Por ello, es mejor evitar este tipo de regalos.

Pañuelos: asociados al duelo

Los pañuelos están vinculados con el dolor y las despedidas, ya que tradicionalmente se asocian con lágrimas y funerales. Obsequiarlos podría enviar un mensaje no intencionado de tristeza.

Vacíos energéticos: regalos sin alma

El Feng Shui sugiere evitar regalos impersonales o que no estén cargados de buenas intenciones. Un obsequio genérico o poco pensado podría carecer de la energía positiva que se desea transmitir durante las festividades.

Elegir el regalo perfecto con base en el Feng Shui no solo asegura un detalle lleno de significado, sino también una forma de mantener la armonía y las buenas intenciones que caracterizan la Navidad.