Nuevo León se ha consolidado como uno de los estados más atractivos para la inversión en México por tres motivos: su ubicación geográfica, capital humano e infraestructura, de acuerdo con el secretario de Economía, Iván Rivas.
El funcionario explicó que Nuevo León está batiendo récords en indicadores como la creación de empleos, la inversión extranjera directa y las exportaciones. Sin embargo, expertos en finanzas advierten que la región también enfrenta ciertos riesgos que deben ser considerados por aquellos interesados en invertir en la Sultana del Norte.
¿Por qué sí invertir en Nuevo León?
En un comunicado publicado el pasado 18 de septiembre de este año, el secretario de Economía, Iván Rivas, explicó que la cercanía con Estados Unidos es uno de los principales atractivos para las empresas y destacó que el 76 por ciento del nearshoring en el país se concentra en Nuevo León, lo que lo convierte en un punto clave para las empresas que buscan aprovechar la cadena de suministro global.
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Además, destacó la educación y la preparación de la fuerza laboral, especialmente en sectores como la ingeniería, la manufactura avanzada y la tecnología.
Finalmente, explicó que el estado cuenta con una amplia infraestructura, incluyendo una red de parques industriales que es la más grande del país, carreteras de alta calidad, puertos, y el reciente desarrollo de proyectos como el puente Colombia y la nueva carretera Gloria-Colombia.
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¿Por qué NO invertir en Nuevo León?
Por otra parte, Marco A. Quiroz, miembro de la Comisión de Sustentabilidad del Instituto de Contadores Públicos de Nuevo León, explicó en una editorial publicada en El Financiero que uno de los mayores desafíos de Nuevo León es la falta de agua.
Señaló que el estado enfrenta serias restricciones en el suministro de agua, una amenaza real para el crecimiento de las empresas. Aunque el Secretario de Economía mencionó que el gobierno está trabajando en proyectos de infraestructura hídrica, el abastecimiento de agua sigue siendo una preocupación central para quienes piensan en establecerse en la región.
Otro aspecto a considerar son los efectos negativos del crecimiento industrial como el daño a la biodiversidad y el crecimiento urbano no planificado, pues el experto considera que las empresas que desean invertir en Nuevo León deben realizar un due diligence exhaustivo para asegurarse de que los terrenos que piensan utilizar no tengan pasivos ambientales, como suelos o aguas contaminadas.
Finalmente, señaló que con la llegada de más de 140 mil personas al año en la entidad buscando trabajo, la presión sobre los servicios públicos, como el suministro de agua, energía y la infraestructura vial, se intensifica.
En conclusión, por una parte, Nuevo León sigue siendo un destino clave para los negocios, con una economía en crecimiento, una fuerza laboral calificada y una infraestructura que lo coloca como uno de los estados más competitivos de México, pero los expertos recomiendan a los inversionistas estar conscientes de los riesgos ambientales que podrían afectar la sostenibilidad de sus proyectos.