El Gobierno estatal de Nuevo León ha emitido una alerta ambiental debido a la mala calidad del aire que se ha registrado por segundo día consecutivo, marcando la novena alerta de este tipo en lo que va del año en la región.
La alerta se activó en respuesta a las altas concentraciones de PM10 (partículas suspendidas en el aire de 10 micrómetros o menos) que se atribuyen a emisiones procedentes de la Refinería de Pemex en Cadereyta. Estas partículas, combinadas con condiciones meteorológicas que limitan la dispersión de contaminantes, han llevado a la acumulación de contaminantes en el área metropolitana de Juárez y Apodaca.
La Secretaría de Medio Ambiente informó en un comunicado que "las emisiones generadas por parte de la Refinería de Pemex en Cadereyta, que se desplazan hacia la zona metropolitana por la parte noroeste, aunadas a las condiciones meteorológicas adversas prevalecientes, en las que predomina la estabilidad atmosférica, han dado lugar a la acumulación de contaminantes, propiciando condiciones de muy mala calidad del aire en Juárez y Apodaca".
En la estación Juárez, se registraron 245 microgramos por metro cúbico de PM10 esta mañana, lo que se considera una calidad del aire extremadamente mala. Estos niveles alarmantes se han vuelto una preocupación para la salud pública y el medio ambiente en la región.
La decisión de emitir la alerta ambiental se produce después de que, ayer, dos estaciones también alcanzaron niveles críticos de contaminación. Cabe destacar que la última alerta ambiental se había registrado en junio pasado. A pesar de que los criterios para emitir la alerta se cumplieron ayer, la Secretaría de Medio Ambiente estatal no la activó en ese momento.
La mala calidad del aire es un problema de salud pública que requiere de acciones inmediatas y efectivas para reducir las emisiones y proteger la salud de la población en la región metropolitana de Nuevo León.