Casi nadie recuerda el nombre de Noé Ramírez Mandujano, ex subprocurador de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada (SEIDO), acusado de recibir sobornos por parte del narco.
Ramírez Mandujano, se desempeñaba como el zar antidrogas durante el gobierno de Felipe Calderón, y supuestamente, se le crearon pruebas falsas en su contra que lo vinculaban con el Cártel de los Beltrán Leyva y el Pacífico.
En noviembre de 2008, fue separado de su cargo, y su detención formó parte de la “Operación Limpieza”, una estrategia militar impulsada por el entonces gobierno donde 25 funcionarios de la antigua PGR—ahora FGR— fueron vinculados a proceso.
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De hecho, fue un mismo trabajador de la Procuraduría General de la República (PGR) quien dijo ser testigo cuando Ramírez Mandujano se reunió en al menos dos ocasiones con miembros del Cartel del Pacífico en la capital del país.
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En dichos encuentros, al ex subprocurador le hacían entrega de un monto de 450 mil pesos como parte del supuesto trato que mantenía con el narco.
Habían establecido una cuota mensual a cambio de que el funcionario otorgara información sobre las investigaciones que se estaban llevando a cabo en contra de dicha célula delictiva.
Con Felipe Calderón nunca se combatió al narco
Noé Ramírez Mandujano fue acusado de delincuencia agravada y delitos contra la salud y pasó 4 años en el penal de Nayarit hasta que fue absuelto el 15 de abril de 2013.
El entonces titular del Juzgado de Procesos Penales Federales del Estado de Nayarit, Mauricio Fernández de la Mora, aseguró en su momento lo siguiente:
“No se entregó prueba idónea y legal que estableciera que el acusado formara parte de esa red de corrupción”.
Ahora, Noé Ramírez Mandujano, ex zar antidroga, se convirtió en uno de los 43 aspirantes a la Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM).