Un grupo de estudiantes y profesores de la Universidad Tecnológica de Altamira, Tamaulipas, fue reconocido por la asociación Somos el Cambio como uno de los 25 proyectos ganadores a nivel nacional, gracias a KID-IA, una aplicación móvil que emplea inteligencia artificial para complementar la terapia de niños con autismo en sus hogares.
La app, ya disponible en Play Store y App Store, busca que las terapias no se limiten a las consultas presenciales —que suelen ser costosas y esporádicas—, sino que las familias puedan dar seguimiento diario con actividades personalizadas.
“Lo que buscamos es apoyar y complementar el trabajo de los terapeutas para lograr una inclusión real. La aplicación incluso puede usarse sin internet para llegar a más familias”, explicó José Antonio Rodríguez Ahumada, integrante del Club de Inteligencia Artificial de la UT Altamira.
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La psicóloga Teódula del Ángel Arteaga, asesora del proyecto, destacó que KID-IA no solo es útil para especialistas, sino también para padres y docentes. “Las terapias pueden costar hasta 800 pesos por sesión, significa un ahorro y un acompañamiento constante para las familias”, dijo.
Además de este reconocimiento, los estudiantes ya trabajan en SIGO, un sistema integral para drones que busca aplicarse en la localización de personas desaparecidas.
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El software ganó recientemente la feria estatal de Ciencia, Innovación y Tecnología en Tamaulipas y competirá en un certamen nacional en Sonora. Actualmente funciona con códigos de prueba similares a un QR, pero el objetivo es que pueda identificar rostros y características físicas para agilizar la búsqueda.
“Queremos darle un uso social a tecnologías que en otros ámbitos se emplean con fines bélicos. Nuestro propósito es que ayuden a reconstruir el tejido social”, añadió Rodríguez Ahumada.
Este proyecto cobra relevancia en un contexto donde México enfrenta una crisis de desapariciones.
Los jóvenes reconocen que aún falta tiempo y recursos para consolidar sus iniciativas, pero “queremos demostrar que desde la universidad se puede transformar nuestro entorno de manera positiva”.
Proyecto VA- Jalisco
Inspirados por la filosofía de Somos el Cambio —siente, imagina, haz y comparte—, los educadores comunitarios de San Gabriel, Jalisco dieron vida al Proyecto VA.
Jesús Ismael Ramírez Castillo, uno de los cinco maestros del Consejo Nacional de Fomento Educativo que encabezan el proyecto-, explicó que el nombre surge tanto de la expresión “va” —como respuesta afirmativa al proponerlo— como de la abreviatura de Valores Autogestivos.
Explicó que el proyecto trabaja con 10 valores: respeto, amor, empatía, bondad, colaboración, responsabilidad, educación, aprendizaje, disciplina y deporte. Cada valor se acompaña de retos comunitarios.
“La comunidad elige qué valores son más importantes para trabajar. Hay quienes toman tres, cuatro o hasta los diez. Lo importante es que cada desafío se haga en comunidad y provoque cambios reales”, explicó.
En cuatro años de continuidad, el Proyecto VA ha impactado a cerca de 40 comunidades y 120 alumnos, y este 2025 resultó ganador por segunda ocasión en la convocatoria nacional de Somos el Cambio.
Una de las transformaciones más significativas ocurrió en la comunidad de El Jardín, donde antes no había un espacio fijo para impartir educación inicial.
“Las sesiones se daban en la plaza o en la caseta ejidal (…) gestionamos apoyos para conseguir un terreno y los propios padres comenzaron a arrimar piedra y materiales. Hoy ya está en pie un nuevo espacio educativo”, compartió con orgullo.
Para Ramírez, lo más difícil ha sido fomentar la disciplina en el deporte, debido a la falta de espacios adecuados.
“Me quedo con la satisfacción de que nuestras comunidades han experimentado muchos cambios. Han aprendido a organizarse, a solucionar necesidades por sí mismas y a trabajar juntas por un mismo fin”, concluyó.
