Por segunda ocasión, Miguel Angel ´Félix Gallardo, fundador del extinto Cártel de Guadalajara, regresó a su celda en la Comisaría para Sentenciados del Estado de Jalisco.
Ahora fue la Fiscalía General de la República (FGR) quien solicitó que fuera enviado al Centro Federal de Readaptación Social del estado de Morelos, pero la petición le fue negada por el juez séptimo de Distrito de Procesos Penales Federales con sede en la Ciudad de México.
Sin embargo, este juzgado sí pospuso la salida del capo hasta que subsanen las fallas que presenta el brazalete electrónico, sin dar fecha de la próxima audiencia.
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Su abogada, María Teresa Vallejo Pérez, acusó a la FGR de una práctica dilatoria, y aseguró que si Félix Gallardo no fue cambiado de reclusorio es porque obtuvieron un amparo que impide que sea trasladado a otro punto del país.
Asimismo, explicó que la FGR argumentó fallas en las alertas del brazalete, cuando -asegura- el dispositivo alerta hasta de crisis y muerte.
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En entrevista, Vallejo Pérez denunció que un helicóptero de la Sedena aterrizó en el reclusorio metropolitano y teme que se lo lleven sin importar el amparo promovido ante un juez de distrito de Jalisco.
Una vez que Miguel Ángel Félix Gallardo fue notificado de esta decisión, presentó problemas de respiración y entró en un periodo de depresión y ansiedad.
De cambiarlo de reclusorio, solo agravaría su salud, ya que no hay medicamentos ni el nivel de atención que requiere el capo de 76 años de edad.