Por enésima ocasión, presuntos sicarios han destruido un tramo de la carretera estatal Apatzingán-Aguililla, agudizando la crisis humanitaria que padecen pobladores de la Tierra Caliente a causa de la violencia de cárteles de drogas.
La Diócesis de Apatzingán confirmó esta mañana que sicarios cavaron una zanja, quizá apoyados por alguna máquina de construcción conocida como "Mano de Chango", en el mismo punto donde desde hace semanas iniciaron los cortes a la circulación, es decir, entre el poblado de El Aguaje y el Puente de Fierro.
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Los más de 45 kilómetros de esa carretera son resguardados por un centenar de agentes de la Policía Michoacán, así como por un grupo de soldados de la XLIII Zona Militar. La Guardia Nacional no tiene presencia en la zona.
Las zanjas en la vialidad han provocado que pobladores de El Aguaje y una decena de comunidades sufran una crisis humanitaria, al no poder acceder a alimentos y productos de primera necesidad.
En Aguililla se vive una cruenta lucha entre sicarios de los Cárteles Jalisco Nueva Generación (CJNG) y de La Nueva Familia Michoacana, éste último, apoyado por sus brazos armados autodenominados como Los Blancos de Troya y Los Viagras