Por ser considerados presos de alta peligrosidad 85 reos sentenciados, en su mayoría secuestradores, homicidas y traficantes de droga, fueron trasladados del Estado de México a penales federales de Oaxaca, Michoacán y Coahuila.
En un operativo sorpresa la madrugada de este martes la Secretaría de Seguridad de la entidad desplegó varios convoyes a 13 cárceles estatales donde estaban los presos catalogados de alto riesgo por su perfil criminológico.
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Los reclusos fueron concentrados en el penal de Neza-Bordo, para luego ser trasladados al hangar de la Guardia Nacional (GN) en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (CDMX), donde fueron transferidos vía aérea hacia penales federales.
El protocolo, destacó el gobierno estatal mediante una tarjeta informativa, se realizó con estricto apego a los derechos humanos de los reclusos que pugnan una condena por diferentes delitos de alto impacto.
Cabe destacar que, previamente fueron certificados por médicos quienes valoraron su estado físico, y se realizaron los protocolos, así como las medidas sanitarias correspondientes.
Con este movimiento, se busca despresurizar los penales, garantizar el proceso de reinserción social e internamiento y así evitar la colusión de células delictivas para prevenir posibles disturbios, fortaleciendo la seguridad y gobernabilidad del Sistema Penitenciario Estatal a través del trabajo coordinado con las autoridades federales.
En el operativo participaron 60 custodios de la SS, 40 policías estatales, en tanto, se utilizaron un rino, dos camiones y 16 vehículos oficiales.