Del 18 de mayo al 22 de junio pasado, un total de ocho manatíes han muerto por causas aún desconocidas en los municipios de Macuspana, Centla y Centro, en Tabasco, informó la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa).
Detalló que para descubrir el origen de estos decesos, en coordinación con especialistas de la Red de Atención para Varamiento de Mamíferos Marinos, han llevado a cabo recorridos de monitoreo, muestreos en calidad del agua y de ejemplares, así como suministro de alimento.
La autoridad ambiental agregó que conforme a los resultados del análisis de agua, los parámetros están en niveles promedio para una vida adecuada de los ejemplares.
Sin embargo, indicó que la Comisión Nacional del Agua también estudia las muestras en su laboratorio a fin de descartar la presencia de plaguicidas e hidrocarburos.
De igual forma, la Profepa dio a conocer que tras analizar la calidad, niveles y temperatura del agua del arroyo El Maluco, donde se encontraron los cuerpos de cinco manatíes, se concluyó que no son factores que influyan en los referidos sucesos.
Aseguró que solo a un ejemplar, el último manatí encontrado muerto el 22 de junio, se le tomó muestra de tejido a efecto de establecer la presencia de algún compuesto tóxico, debido a que en el resto de los animales no fue posible por el avanzado estado de descomposición que presentaban.
Respecto a la alimentación, los especialistas determinaron que el último manatí hallado, era una hembra con signos de desnutrición, por lo que fueron identificadas varias zonas para instalar comederos, cerca de árboles frutales y a orillas de la laguna, donde hay un mayor avistamiento.
En este sentido las autoridades pidieron a la población que vive a orillas del cuerpo lagunar mantener la vegetación que hay en las orillas de la laguna, que es de donde se alimentan los manatíes.
En tanto los especialistas continuarán con sus labores para prevenir más decesos y encontrar un diagnóstico del problema.