Al dar a conocer el proceso que llevan las indagatorias por los tres italianos desaparecidos en Tecalitlán, Jalisco, la Fiscalía General del Estado (FGE), informó que en la denuncia interpuesta por los familiares el 1 de febrero encontraron varias inconsistencias.
Además, según el fiscal general, Raúl Sánchez Jiménez, los extranjeros se dedicaban a vender plantas de luz, de soldadura y herramientas piratas, por lo que al darse cuenta de esto, la dependencia estatal, cambió el giro de la primera línea de investigación.
En una reunión realizada ayer con el consejero de la embajada de Italia, Simón Landini y el agregado de la Policía de Italia, Guido Lannelli, la Fiscalía cruzó información, donde confirmaron que el mayor de los desaparecidos, Raffaele Russo, contaba con antecedentes penales en México al ser detenido hace tres años en Campeche.
La aprehensión, en febrero de 2015, fue a raíz de una denuncia de empresarios de esa entidad por fraude, quienes aseguraron que Raffaele, junto con otros tres italianos les vendieron herramienta como original, pero en la revisión se percataron que era china.
Sánchez Jiménez dijo también que solicitaron a la autoridad italiana los antecedentes de los tres desaparecidos en su país y de otras tres personas más que habían llegado junto con ellos y permanecían en la Ciudad de México.
La Fiscalía General de Jalisco anunció hoy la intervención de la Policía Municipal de Tecalitlán integrada por 33 elementos.
Sin confirmar que estuvieron involucrados en la desaparición y con la justificación de que esto les permitirá seguir con la investigación, el fiscal general, Raúl Sánchez Jiménez, dio a conocer que los policías fueron desarmados y serán capacitados en la académica de la dependencia estatal. Mientras tanto serán ellos quienes se hagan cargo de la seguridad en el municipio.
La última declaración de dos de los italianos desaparecidos fue que habían sido detenidos por los elementos municipales; una línea de investigación que según Sánchez Jiménez sigue activa.