El ensamblado de la Patrulla Oceánica de Largo Alcance (POLA) de la Marina Armada de México en el Astillero 20 de Salina Cruz, Oaxaca, no solo representó la construcción del primer buque de su tipo en América Latina, además se emplearon materiales y mano de obra mexicana, lo cual demostró la habilidad y capacidad del personal naval para fabricar embarcaciones de gran calado al nivel de cualquier industria naviera del mundo.
Foto: Twitter @QuadratinMexico
#Entérate la tripulación de la POLA incluye a 14 mujeres. Trabajamos por la inclusión de la mujer en el ambiente laboral-militar. #SoyNaval #SoyHechoEnMéxico y #ParaServirAMéxico pic.twitter.com/ts85KqoKBV
— SEMAR México (@SEMAR_mx) 22 de noviembre de 2018
Considerado como un buque multipropósito de 107 metros de largo y 14 metros de ancho, POLA tiene la capacidad de desplazarse a 20 nudos que equivalen a una velocidad de 50 kilómetros por hora con una autonomía de 20 días en altamar, transportando a una tripulación de 122 marinos y operando un helipuerto para modelos de gran capacidad como el Seahawk y el LH90.
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Su propulsión es combinada indistintamente por fuentes de energías a base de diesel, mecánica y eléctrica que le permiten dar mejores rendimientos y maniobrabilidad en comparación con las fragatas con la que cuenta la Marina Armada.
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Impulsando la Industria Naval, nuestra Patrulla Oceánica de Largo Alcance #POLA es un buque diseñado para la protección de tráfico y comercio marítimo. Conoce más de sus características #ParaServirAMéxico pic.twitter.com/gutV2inTsB
— SEMAR México (@SEMAR_mx) 17 de enero de 2018