El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, tildó este martes de “corrupto” y desestabilizador al régimen cubano, al reiterar que el embargo económico que pesa sobre la isla no se levantará hasta que se produzcan las necesarias reformas.
“No levantaremos las sanciones al Gobierno cubano hasta que haga reformas fundamentales”, sostuvo Trump en su intervención, la primera, ante la Asamblea General de las Naciones Unidas.
En junio pasado, en un discurso en Miami, Trump anunció la “cancelación” de la política de su antecesor, Barack Obama, hacia Cuba, que propició la normalización de las relaciones bilaterales y la reapertura de las embajadas en Washington y La Habana.
Los principales cambios ordenados por Trump son una prohibición para que las empresas de Estados Unidos hagan negocios con compañías cubanas de propiedad o controladas por las Fuerzas Armadas Revolucionarias (FAR) de Cuba y restricciones a los viajes de ciudadanos estadounidenses a la isla.
“Haremos cumplir el embargo”, dijo entonces Trump y hoy insistió en esa misma idea ante la ONU.