Las hormigas gigantes, conocidas como chicatanas en Oaxaca y como nocú en algunas zonas de Chiapas, son una comida exótica que en la costa Oaxaqueña se cotizan hasta en mil pesos el kilo.
Estos insectos comestibles, que solo surgen de la tierra una vez al año en las primeras lluvias de los meses de mayo o junio, se han convertido en un platillo atractivo para quienes gustan de este tipo de alimentos.
En Puerto Escondido, el kilogramo de la hormiga se llega a vender hasta en mil pesos; sin embargo, hay quienes son más reservados en los precios y las ofrecen en 800 pesos.
También en las redes sociales se comercializa este producto, e incluso las personas hacen trueques y piden intercambiar uno o dos kilos de chicatanas por algún teléfono celular u otros artículos de buena calidad.
Esta singular hormiga se ha vuelto cotizada porque ha crecido el gusto de las personas por consumirlas y con ello la demanda y los precios cada año son más elevados.
Los vendedores señalan que los precios también se encarecen por la forma en que hay que capturar a las hormigas.
Esto implica desvelos e inclusive mordidas de los insectos al momento de querer atraparlos. Ellas salen de la tierra (nidos) en las primeras lluvias fuertes de la temporada y en horas de la madrugada, entre cuatro y seis de la mañana, de ahí que este sea uno de los motivos por el cual se encarece su precio.
Lee la nota completa aquí