El Consejo Permanente de la Organización de los Estados Americanos (OEA) aprobó, en sesión extraordinaria, la resolución 1078 en la que urge al gobierno de Venezuela a actuar para garantizar la separación e independencia de los poderes constitucionales y restaurar la plena autoridad de la Asamblea Nacional.
Puntualizó que las decisiones del Tribunal Supremo de suspender los poderes de la Asamblea Nacional y de arrogárselos a sí mismo son incompatibles con la práctica democrática y constituyen una violación del orden constitucional de aquella nación.
Del mismo modo, el Consejo Permanente de la OEA pidió al gobierno venezolano mantenerse dispuesto a apoyar las medidas que permitan el retorno al orden democrático a través del ejercicio efectivo de la democracia y el estado de derecho en el marco constitucional.
Asimismo, hizo un llamado para emprender, en la medida que sea necesario, gestiones diplomáticas adicionales para fomentar la normalización de la institucionalidad democrática, de conformidad con la Carta de la Organización de los Estados Americanos y la Carta Democrática Interamericana, incluyendo la convocatoria de una reunión de nivel ministerial.