Corea del Sur, Estados Unidos y Japón expresaron este miércoles que están dispuestos a buscar todas las opciones diplomáticas posibles sobre Corea del Norte, para resolver el problema nuclear de manera pacífica, a través del diálogo.
El viceministro surcoreano de Asuntos Exteriores, Lim Sung-nam, se reunió este miércoles en Seúl con el subsecretario de Estado estadunidense, John Sullivan, y el viceministro japonés de Asuntos Exteriores, Shinsuke Sugiyama, para examinar la situación en la península coreana.
En una conferencia de prensa tras la cumbre trilateral, los aliados expresaron que están dispuestos a negociar y buscar todas las opciones diplomáticas posibles para inhibir el desarrollo nuclear norcoreano, a través de una estrecha coordinación entre los tres países.
El vicecanciller de Corea del Sur destacó que en particular, los tres países sostuvieron el mismo punto de vista de que es esencial manejar establemente la situación en la península coreana, al mismo tiempo que se mantiene la presión sobre Corea del Norte.
Sullivan destacó por su parte que Estados Unidos está “comprometido” con la diplomacia para evitar el crecimiento nuclear de Corea del Norte, y que su objetivo final es llevar a ese país a la mesa de negociaciones.
El subsecretario de Estado estadunidense dijo que están comprometidos con la campaña de presión sobre la República Popular Democrática de Corea (RPDC), nombre oficial de Norcorea. Recalcó que su objetivo es desnuclearizar la península coreana.
Sullivan, no obstante, consideró que deben estar preparados para “responder a cualquier circunstancia”, dado que Pyongyang es “impredecible” y “no transparente”.
Por su parte, el viceministro japonés de Asuntos Exteriores resaltó que por ahora Corea de Norte no muestra ninguna intención de reanudar los diálogos sobre sus programas nucleares y de misiles.
También hizo hincapié en la necesidad de seguir aplicando la presión e inducir al régimen norcoreano a cambiar su cálculo estratégico y asegurarse de que hay un “futuro brillante” esperando por si el Norte tomara el camino correcto.
La cumbre trilateral se llevó a cabo en medio de las tensiones provocadas por la sexta prueba nuclear de Corea del Norte, realizada el mes pasado, y por la retórica belicista entre Trump y el régimen comunista, que han sugerido posibles acciones militares.