Habitantes de la comunidad de Santa Lucía, municipio de Ocuilan, Estado de México, decidieron no esperar la ayuda de las autoridades y este fin de semana iniciaron la construcción de aulas de madera para reubicar -temporalmente- las escuelas primaria y secundaria que quedaron destrozadas por el sismo del pasado 19 de septiembre.
Organizados en brigadas, con sus propios recursos, los pobladores bajaron madera y adquirieron láminas de cartón para edificar los salones para que sus hijos no sigan perdiendo clases.
Se trata de la Primaria “Miguel Hidalgo” y la Telesecundaria “José María Velasco” que por algunos meses estarán ubicadas en el campo de futbol.
“En esta área se construirán temporalmente las escuelas de la comunidad indígena de Santa Lucía, dañadas por el terremoto… Le pedimos ayuda al gobierno federal, estatal y municipal”, dice una de las lonas que fueron colocadas en el área donde construyen las aulas de madera.
Ocuilan ha sido considerado por el gobierno del Estado de México el municipio más afectado por el terremoto de 7.1 grados, donde casas, escuelas e iglesias colapsaron o sufrieron fracturas considerables.