Tras las movilizaciones y bloqueos que se llevaron a cabo en varios puntos de la Ciudad de México, así como una huelga de hambre que duró 50 horas, integrantes del Sindicato Fuerza Independiente de Trabajadores de la Salud anunciaron el retiro de su campamento frente al IMSS Bienestar y la suspensión de las marchas en la capital del país.
Trabajadores y autoridades firmaron un acuerdo y pactaron la instalación de mesas de trabajo para los días 23 y 24 de julio.
Al dar por concluida la movilización, Belén Benítez, secretaria de Estrategia del sindicato, explicó que dentro de los acuerdos firmados destaca la emisión de circulares que garanticen los derechos de las personas trabajadoras, como cuidados maternos y los lineamientos para el acompañamiento de pacientes durante traslados.
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También se acordaron la sustitución de plantillas en los hospitales y el pago de días festivos al doble.
Otro punto fue la entrega de nombramientos en todo el país, ya que actualmente muchos carecen de jornada, horario y adscripción, lo que obliga a los trabajadores a cambiarse de entidad sin previo aviso.
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Además, denunció que el Fonacot no se ha activado desde enero de este año, a pesar de ser un derecho para todos los trabajadores.
Benítez demandó el cese de la represión hacia los trabajadores de la salud que se han movilizado y criticó que hayan sido golpeados por policías.
Comentó que en la Ciudad de México existe un doble rasero, pues las autoridades permiten la libre manifestación de grupos que cometen desmanes y actos vandálicos, mientras que a sus agremiados se les retiró de la vía pública de manera violenta.