En una decisión que busca equilibrar las necesidades económicas del sector transportista con el derecho a una movilidad accesible, el Gobierno de la Ciudad de México autorizó un incremento de $1.50 pesos a la tarifa del transporte público concesionado
La medida se concretó tras una reunión celebrada este 31 de octubre de 2025 entre secretarios de Estado y 17 líderes de la Fuerza Amplia de Transportistas (FAT), quienes habían pospuesto un megabloqueo previsto para esa semana. El acuerdo incluye compromisos obligatorios de mejora en la seguridad y calidad del servicio para los usuarios.
¿Cuál será la nueva tarifa del transporte en la CDMX?
El incremento de $1.50 pesos aplicará a las tarifas actuales del transporte de Ruta y Corredor, lo que significa que el costo mínimo pasará de $6.00 a $7.50 pesos, mientras que la tarifa máxima aumentará de $8.00 a $9.50 pesos. Cabe destacar que este ajuste no aplica para el Sistema Metrobús, cuyo precio se mantiene sin cambios.
La fecha exacta de implementación de la nueva tarifa está sujeta a la publicación de las disposiciones correspondientes en la Gaceta Oficial de la Ciudad de México, entrando en vigor al día siguiente de su aparición en este diario oficial. Las unidades deberán exhibir la nueva tarifa autorizada en lugares visibles; de lo contrario, el aumento no tendrá efecto.
Transportistas adquieren compromisos para mejorar el servicio
Como contraparte del aumento tarifario, las autoridades de la Secretaría de Movilidad (Semovi) establecieron condiciones obligatorias que los transportistas deben cumplir para garantizar mejoras tangibles en el servicio. Estos compromisos se agrupan en tres áreas principales:
- Seguridad y mantenimiento: Los conductores deberán portar licencia Tipo "C" vigente y visible, retirar vidrios polarizados de las unidades, contar con seguro de responsabilidad civil vigente y exhibir el número de placa en la cromática del vehículo . Además, se comprometen a realizar revisiones periódicas de luces, puertas, pasamanerías, llantas y frenos, así como asegurar el correcto funcionamiento de dispositivos de seguridad como cámaras, botones de auxilio y GPS.
- Calidad e imagen: Para mejorar la experiencia del usuario, los operadores deberán portar uniforme consistente en pantalón oscuro y camisa blanca, mantener las unidades en condiciones óptimas de limpieza y participar en programas de capacitación continua . Estas medidas buscan profesionalizar el servicio y elevar los estándares de atención al público.
- Transparencia y cumplimiento: Tanto concesionarios como permisionarios están obligados a exhibir de manera permanente y visible la tarifa autorizada en sus vehículos, terminales y bases. El incumplimiento de esta disposición anula la actualización tarifaria para dichas unidades.
El aumento de $1.50 pesos al transporte público en la CDMX representa un equilibrio frágil entre la viabilidad económica del servicio y la protección al bolsillo de los usuarios. Por tercera vez en una década, los capitalinos deberán destinar más recursos para sus traslados diarios, ahora con la expectativa tangible de recibir un servicio más seguro, limpio y profesional a cambio.